5 de mayo de 2024

Centro izquierda

19 de marzo de 2018
Por Rudolf Hommes
Por Rudolf Hommes
19 de marzo de 2018

Rudolf Hommes

rudolf hommesAhora es evidente que un gobierno que no es de derecha no le entregará el país a las FARC. Conviene entonces discutir qué le ofrecería un candidato de centro izquierda al país. Un gobierno de centro izquierda parte de dos premisas radicalmente diferentes de las que animan a los candidatos de derecha. La primera es que el Estado es independiente del gran capital, de los medios y de los grupos de interés o de presión. El papel reservado para el Gobierno es el de rector y regulador de la sociedad y de la economía, y el de árbitro en conflictos entre sectores. Solo en casos excepcionales, como cuando le corresponde actuar en defensa de los débiles o de los intereses del Estado, la Nación o el bien común, los gobiernos deben tomar partido a favor o en contra de un sector de la sociedad, y nunca a favor de un interés particular especifico.

En segundo lugar, un gobierno de centro izquierda o liberal igualitario está obligado a proteger al capitalismo de sus peores y más autodestructivas características, previniendo el abuso del poder económico en los mercados, o que se use la riqueza para monopolizar poder político, como lo hacen, por ejemplo, los plutopopulistas norteamericanos que tienen un excesivo control del Estado a través de financiar las campañas políticas. En las tensiones entre empleadores y trabajadores el Gobierno debe proteger los derechos y los ingresos de los trabajadores y prevenir excesos de cualquiera de las dos partes. En general, debe el Gobierno fortalecer el contrato social y avanzar hacia una mayor equidad y justicia social, priorizando mejorar las condiciones de vida de los más pobres e igualar a todos los habitantes en acceso a los bienes y servicios públicos. Son políticas para ‘nivelar el campo de juego’.