Mucha burocracia poca seguridad
La propuesta de crear una Secretaría de Seguridad para resolver la violencia resultó un estruendoso fracaso. Ya son tantos los funcionarios, que no caben en el Edificio de la Alpujarra y han tenido que salir a alquilar otros espacios para acomodarse.
En la Alcaldía existen 6 jugosas entidades combatiendo la inseguridad pero sin resultados. Despacho del Alcalde. Una Empresa de Seguridad Urbana. Una Secretaria de Gobierno. Se creó la Secretaria de Seguridad. Se Creó la Consejería para la Reconciliación y la Convivencia. Se creó la ViceAlcaldía de Seguridad. Estamos ante La Alcaldía de la Burocracia. A cada problema social, la única respuesta es más burocracia.
Resulta grotesco y macrocefálico que hayan SEIS entidades burocráticas pisándose las colas, unas a otras, mientras los bandidos se adueñan de la ciudad. Los bandidos no están en la Alpujarrra. A las Fuerzas de Seguridad del Estado hay que apoyarlas sin medida y exigirle sin descanso. No existe liderazgo para la seguridad.
El delito camina más rápido que la burocracia. Son más eficientes los bandidos que los burócratas. Los ilegales se mantienen más actualizados que la burocracia estatal. La tecnología estatal para la seguridad se envejece en los largos y tediosos procesos de licitación mientras que los bandidos siempre viven al día en tecnología e información. Los bandidos no hacen licitaciones para delinquir. Medellin es mucha burocracia y poca seguridad.
Un ciudadano pide un taxi y llega en cinco minutos. Un ciudadano pide seguridad y nunca llega.
