20 de septiembre de 2025
Augusto Trujillo Muñoz


La guerra contra las drogas fue declarada por los gringos hace más de medio siglo y ese mismo tiempo hace que se viene perdiendo todos los días en todos los sitios del mundo. El narcotráfico es el negocio global más lucrativo, después del de las armas, y no es casual que el país con el mayor consumo de drogas del planeta sea también el más beneficiado con el negocio de las armas.


Los medios de comunicación juegan un múltiple papel en la sociedad: informan, orientan, denuncian, convocan a la protesta o a la solidaridad y así cumplen funciones indispensables para el buen funcionamiento de una sociedad democrática.


El lunes anterior se reunieron en Santiago de Chile los presidentes de cuatro países de América del sur y el presidente del gobierno español. Su propósito fue convocar a otros de sus colegas para comprometerlos con la defensa de la democracia.


Con inmenso sentido de futuro, el Constituyente incorporó al espíritu de la Carta del 91 un equilibrio entre Estado social de derecho y economía social de mercado que resulta clave en el mundo actual.


Las líneas transcritas son apartes de una reciente columna de prensa, escrita por el jurista José Gregorio Hernández para el diario ‘El Tiempo’, titulada ‘Un trámite deplorable’.


Colombia tiene más geografía que historia y más territorio que Estado. No gratuitamente está invadida por la intransigencia y la obcecación.


Los colonos ingleses que viajaron a Norteamérica en medio de los conflictos religiosos de su madre patria trajeron consigo la versión puritana de un calvinismo fanático.


La democracia mayoritaria de origen anglosajón, aplicada a las sociedades actuales terminó imponiendo una especie de dictadura de las mayorías que desconoce la diversidad y desecha la idea de los acuerdos con el adversario.


La democracia, cuya razón de ser garantiza las libertades, la igualdad, la propiedad y los controles sobre el poder, dejó de funcionar cabalmente.


Las elecciones presidenciales en Venezuela fueron una vergüenza. Pero las reacciones de organismos, gobiernos, medios de comunicación y usuarios de redes fueron una lástima por sus características cerriles.
