29 de marzo de 2024

El voto compasivo

13 de diciembre de 2021
Por Por Oscar Jiménez Leal.[i]
Por Por Oscar Jiménez Leal.[i]
13 de diciembre de 2021

Diversas motivaciones promueven el voto ciudadano en la elecciones democráticas. Desde el voto ilustrado que es aquel que se emite después de un análisis de las condiciones del candidato y  la seriedad y conveniencia del programa de gobierno presentado, hasta aquellas que envilecen el sistema político y degradan la condición humana como la compraventa del mismo, sin dejar de lado, desde luego, la abstención de sufragar que bien puede significar ausencia de cultura política, falta de credibilidad en las instituciones, indiferencia frente al destino colectivo o franca reacción de protesta  contra el orden establecido.

Pero surgió otra modalidad en la literatura norteamericana y es el voto compasivo, aquel mediante el cual el elector expresa su espontánea solidaridad con el candidato o con sus sucesores o herederos que padecieron alguna tragedia y, por lo tanto, fueron víctimas  del aniquilamiento físico o moral de uno de los suyos.

“Eso no hará más que incrementar el voto por compasión”, responde el senador Sexton, candidato presidencial de los Estados Unidos, cuando su asistente le recuerda la amenaza de muerte que se cierne sobre su propia hija si da a conocer los documento que revelan la falsedad de los descubrimiento de la NASA, que le permitirían arrasar con la reelección del Presidente en ejercicio. (La Conspiración, Dan Brown, página 364).

Quizás sería el caso del trágico asesinato del Presidente John F. Kennedy el 22 de noviembre de 1963 en Dallas, Texas, por parte Lee Harvey Oswald que diera lugar más tarde a la candidatura presidencial de su hermano menor Robert F. Kennedy también asesinado el 2 de junio de 1968 en el Hotel Ambassador de los Ángeles, California, por el palestino Sirhan Sirhan, a quien las encuestas señalaban como el futuro Presidente. O le otorgara la postulación presidencial  a Edward Ted Kennedy, hermano de los anteriores, cuya candidatura naufragó en las aguas de la bahía de Chappaquidick en el accidente automovilístico del que salvó su vida, pero dejó abandonada a su suerte a su secretaria privada, Mary Jo Kopech, el 18 de junio de 1969, y cuyo cadáver fue rescatado por las autoridades, razón por la cual fue condenado a prisión.

El voto compasivo hizo posible que el actor Arnold Schwsarzenegger. “Terminator”, fuera dos veces elegido Gobernador del poderoso Estado de California, beneficiario de la solidaridad por la tragedia de la familia, a través del matrimonio con María Shriver Kennedy, sobrina del Presidente asesinado.

La solidaridad del voto compasivo alcanzaría hasta para elegir a Joe Kennedy III, nieto de Robert, representante a la Cámara por su estado natal, Massachusetts, quien se hizo famoso por haber replicado con dureza el discurso anual del Presidente Donald Trump. Así varios miembros de la familia han sido beneficiados políticamente por el martirologio de su estirpe.

Si se aplicase a la Colombia de hoy el voto compasivo, el primer beneficiario sería el Presidente César Gaviria Trujillo, quien pasó de ser jefe del debate de la campaña liberal a ser elegido Presidente, después del asesinato de Luis Carlos Galán en Soacha y la misma familia Galán que subsiste en política como beneficiaria del glorioso legado.

Por su parte, Andrés Pastrana Arango fue beneficiado de su propia tragedia al ser  elegido Alcalde Bogotá después de su execrable secuestro al que fue sometido por la mafia del narcotráfico.

Los sucesores de Álvaro Gómez Hurtado pueden recibir beneficios de la solidaridad del voto compasivo, una vez obtenida la personería del Movimiento Salvación Nacional y participar en la liza electoral.

Gustavo Petro Orrego pudo beneficiarse del voto compasivo en la pasada campaña presidencial, en virtud de la persecución política y judicial a que fue sometido y que terminó con su destitución de la Alcaldía decretada por el Procurador Alejandro Ordoñez Maldonado. El mismo candidato del Centro Democrático Oscar Iván Zuluaga bien podría ser beneficiado por el voto compasivo de solidaridad tras haber sido aniquilada moral y judicialmente su candidatura presidencial del 2014, víctima de un  complot en su contra, como lo confesó el Hacker Andrés Sepúlveda.

He ahí un elemento novedoso y adicional -el voto compasivo-, que no debe estar ausente de los análisis  del acontecer electoral.

 

Bogotá 13 de diciembre de 2021