El fin, no justifica los medios
Con relativa frecuencia escuchamos decir: el fin justifica los medios, frase que se aplica cuando alguien ha conseguido de manera irregular, por algún método no exactamente ético, pero que, a pesar de haberlo realizado de aquel modo, ha valido la pena por el resultado conseguido.
Esta frase se emplea para justificar cualquier acto o medio contrarios a la ética y a las buenas costumbres, pero que supone un fin presumiblemente bueno.
Con dicha frase el individuo coloca en un segundo plano los principios morales y éticos, y justifica todos sus medios dañinos, siempre y cuando le permita alcanzar un fin determinado.
El reconocido escritor inglés Aldous Huxley consideró que los fines nunca pueden justificar los medios, porque los medios usados determinan la naturaleza del fin que se pueda alcanzar. Es decir, fin contaminado, contamina los medios y como lógica consecuencia también contamina el resultado final.
Algo parecido y muy lógico, a lo que conocemos en el derecho penal como aquel principio del fruto del árbol envenenado cuando nos referimos a las pruebas. Lo que es malo de origen, siempre seguirá siendo malo.
Esta frase tradicionalmente se le ha atribuido al filósofo, político y escritor italiano Nicolás Maquiavelo, en su obra El Príncipe, publicada en 1532 en la cual el autor defiende la imposición de cualquier teoría o plan político por parte del gobernante para permanecer en el poder, ante cualquier situación.
Hay otras teorías que le adjudican dicha sentencia a Napoleón Bonaparte, que en el libro El Príncipe, anotó una frase con un significado parecido “Triunfad siempre, no importa cómo y siempre tendréis razón” de la cual se puede llegar a la misma conclusión.
Sin embargo, hay otros investigadores e historiadores que le conceden dicho aforismo al teólogo alemán Hermmann Busenbaum, que en su libro “Medulla theologiae moralis”, consigna la frase “Cum finis est licitus, etiam media sunt licita”, que corresponde a “Cuando el fin es lícito, también lo son los medios”.
El fin justifica los medios es una frase que señala al individuo dispuesto a realizar cualquier cosa que desea para conseguir o cumplir un objetivo. Dicha frase en un principio se aplicaba únicamente en el ámbito de la política, o los negocios, pero actualmente se ha ampliado a muchos escenarios de la vida.
Desgraciadamente, esta desafortunada frase ya ha pasado de la teoría a la práctica y se volvió común en todas las actividades en el mundo actual Y en nuestro país es arma contundente de muchos políticos, no todos, que no solamente quieren escalar posiciones, aumentar su poder, obtener objetivos partidistas, engañando a la gente con sus discursos falaces y peligroso.
Estos irresponsables de la política hacen caso omiso a las graves consecuencia que su discurso puede tener en el ámbito nacional, en una época de nuestra historia en la cual la polarización es uno de los delicados estados de la Colombia de hoy.
Parece que aquellos políticos no conocen o no les importa el valioso sustantivo, prudencia, que hace verdaderos sabios, como reza una de nuestras conocidas oraciones, que es lo que tiene que primar en un país muy convulsionado por discursos falsos y violentos.