28 de marzo de 2024

¿Hay enfermedades invisibles en el ámbito laboral?

31 de mayo de 2019
Por Jorge Iván Duque Cardona
Por Jorge Iván Duque Cardona
31 de mayo de 2019

El título de esta columna no es una pregunta frecuente. Muy pocas veces la gente se pregunta si en el ámbito laboral hay enfermedades invisibles. Aunque es algo que debería hacerse, pocos lo hacen. Nadie piensa que el trabajo puede generar una enfermedad de esas que los médicos llamamos invisibles. Pero están ahí. Y cualquier trabajador la puede adquirir. Es esta la razón por la cual las empresas deben enviar a sus trabajadores a exámenes con alguna regularidad.

¿Cuál puede ser una de esas enfermedades invisibles en el ámbito laboral? Se los voy a contar: la fibromialgia. Posiblemente algunos de los lectores de esta columna nunca han escuchado este nombre. Así que ténganlo en cuenta. ¿La razón? No se descubre fácilmente. Sobre todo porque sus síntomas son comunes, es decir, no le son extraños al cuerpo humano. Esos síntomas nadie los asocia con una enfermedad desconocida porque son frecuentes en cualquier patología.

Vamos al grano. El pasado 12 de mayo se celebró el Día de la Fibromialgia. Eso como que nadie lo supo. Ni siquiera los grandes medios de comunicación lo mencionaron. Aunque fue establecido por la organización Mundial de la Salud, pasó inadvertido. Solo los sitios Web especializados en temas de medicina hicieron mención a esa celebración. Uno de ellos fue el portal OTP, especializado en prevención de riesgos laborales.

Pues bien: la Fibromialgia es una enfermedad que la padecen el 2.4% de la población mayor de 20 años, donde las mujeres representan el 85% de los afectados. Es de evolución crónica y de etiología desconocida. El informe señala que se caracteriza “por la presencia de dolor musculoesquelético difuso de origen no articular, y se acompaña habitualmente de sueño no reparador, fatiga o cansancio, rigidez matutina y alteraciones cognitivas”.

Podría decirse que es una afección donde la persona tiene un dolor prolongado que se propaga por todo el cuerpo. Ese dolor casi siempre está relacionado con fatiga, problemas de sueño, dolores de cabeza, depresión y ansiedad, por lo que quien lo tiene no le da mucha importancia. Las personas con fibromialgia también pueden tener sensibilidad en las articulaciones, los músculos, los tendones y otros tejidos blandos.

¿Cuáles son las causas de la fibromialgia? Los investigadores piensan que “se debe a un problema con la manera en la que el sistema nervioso central procesa el dolor”. Y señalan que las posibles causas desencadenantes de la enfermedad pueden ser un trauma físico o emocional o las alteraciones del sueño. Sus síntomas pueden ser un dolor prolongado del cuello o de la espalda, alguna depresión, una fatiga prolongada o una tiroides hipoactiva.

Es bueno aclarar que la fibromialgia no afecta a ningún órgano vital, ni produce secuelas físicas. Tampoco es degenerativa ni deformante. Además, no influye para nada en la supervivencia del paciente. La médica Filo Gracía, especializada en enfermedades del trabajo, que presta sus servicios profesionales a la OTP, señala: “la importancia de la fibromialgia radica en su frecuencia, comorbilidad, dificultades diagnósticas, complejos y prolongados tratamientos, repercusión social y laboral, más que en su gravedad”.

Las personas con fibromialgia pueden sentir, entre otras cosas, dolores intensos en la noche, problemas gastrointestinales, sensación de cansancio, altibajos emocionales, dificultad para dormirse, falta de concentración, hormigueo en los pies y dolor de cabeza constante. Los especialistas en esta enfermedad invisible recomiendan a los empleadores establecer para quienes la sufren horarios de trabajo flexibles y descansos frecuentes durante la jornada laboral.

Los servicios de prevención de riesgos laborales juegan un papel importante a la hora de facilitar la actividad de los trabajadores a quienes se les haya dictaminado esta enfermedad. Allí se dice que evitar los movimientos repetitivos ayuda a mejorar la sintomatología.