28 de marzo de 2024

Los clústeres de cafés especiales.

11 de enero de 2019
Por Armando Rodríguez Jaramillo
Por Armando Rodríguez Jaramillo
11 de enero de 2019

La historia de Colombia no se puede contar sin mencionar al grano que nos dio identidad y generó desarrollo y bienestar. Sin embargo, la caficultura tradicional se volvió incierta luego de la disolución del Pacto Internacional de Café (1989) que establecía cuotas de producción para los países cultivadores y controlada la oferta mundial. Hoy el producto se transa en el mercado de las materias primas indiferenciadas con grandes volúmenes y bajos precios sin que la calidad sea el factor determinante.

Según el USDA, en 2018/19 Brasil y Vietnam dispararán la producción mundial de café a 171,2 millones de sacos de 60 kilos frente a un consumo global que se espera marque 163,2 millones de sacos lo que afectará los precios y nos pone de cara a un desafío de grandes proporciones en razón a que los cultivos de ladera son de difícil mecanización y demandan gran cantidad de mano de obra comprometiendo nuestra productividad que tan sólo es de 18,7 sacos/ha. Así que debemos decidir si continuamos produciendo café básico para competir en mercados saturados a precio de bolsa o nos esforzamos por ser excelentes en la producción de cafés especiales y diferenciados que son apreciados por su calidad, perfil de taza, preparación y servicio.

Una forma de responder a este reto han sido las Rutas Competitivas promovidas por el Ministerio de Comercio, Industria y Comercio e INNpulsa Colombia a través de las cámaras de comercio, iniciativas que sirvieron para identificar, en el caso del café, nuevas tendencias de consumo, conocer la cadena de valor, seleccionar segmentos de negocio rentables y diseñar planes de acción, elementos esenciales para comprender en qué negocios se debe competir y con qué estrategias hacerlo.

Hoy se avanza hacia la organización de clústeres de cafés especiales en varios departamentos como espacios de diálogo y concertación entre gobiernos, gremios, academia y empresarios que participan en el cultivo, beneficio, trillado, tostado, empaque, comercialización, logística, distribución y tiendas especializadas con el propósito de fortalecer la competitividad empresarial, mejorar la calidad, sofisticar la producción, generar valor agregado, formar talento humano especializado, diseñar nuevos modelos de negocios, apropiar la innovación, incursionar en mercados sofisticados nacionales y globales, impulsar el emprendimiento, generar empleos de calidad, incrementar el ingreso y aumentar el bienestar.

De ahí que las iniciativas clúster sean una excelente respuesta a la poca rentabilidad de los cafés básicos al aportar mayor entendimiento del negocio a través de nuevos conocimientos en cultivo, beneficio, tostación, cata y barismo, al tiempo que proponen diferentes modelos de negocios, disímiles presentaciones de productos y diversificación de mercados. A lo que se suma la integración de los cafés especiales y el turismo de experiencias para atraer turistas deseosos de recorrer la tierra del café, experimentar su cultura y conocer cómo se produce y se prepara esta espectacular bebida.

Por sus bondades, esta estrategia competitiva empieza a ser reconocida tal como sucedió en el tercer congreso nacional de iniciativas clúster, INNclúster 2018, realizado en Bucaramanga, donde se premió al Clúster de Cafés Especiales del Quindío como el Mejor Clúster de Colombia en la Categoría de Consolidación. (Publicado en Dimensión Económica Edición 23/dic 2018)

@arj_opina