Armenia reduce el desempleo y el mercado laboral muestra señales de recuperación

Armenia, 3 de febrero de 2025. El 2024 deja una imagen positiva del mercado laboral en Armenia, con una notable disminución en las tasas de desempleo y un crecimiento sostenido de la ocupación. Según los datos oficiales del DANE y el análisis del Observatorio Económico de la Secretaría de Hacienda, la tasa de desempleo de la ciudad se redujo en un 0.9%, alcanzando un 1.11% en comparación con el año anterior. Este descenso se suma a un aumento del 2.1% en la tasa de ocupación, que alcanzó el 53.2%, un reflejo claro de la dinámica económica positiva que está tomando fuerza en la región.
La reducción en la tasa de desempleo, además de ser un indicador favorable de recuperación económica, muestra que Armenia está avanzando hacia un panorama más estable en términos de empleo. El aumento en la tasa de ocupación es aún más revelador, pues se traduce en más personas integradas al mercado laboral, lo que representa una oportunidad económica para los ciudadanos.
El sector comercial, junto con actividades artísticas, alojamiento y servicios de comida, fueron los principales impulsores del crecimiento del empleo en la ciudad. Estas áreas, particularmente las vinculadas al turismo y la cultura, parecen ser claves en la recuperación económica local. En contraste, sectores como la construcción, la agricultura y las tecnologías de la información registraron disminuciones en la ocupación, lo que podría reflejar las reconfiguraciones del mercado laboral en un contexto de desafíos globales.
Una de las señales más alentadoras es el comportamiento del mercado laboral en el trimestre octubre-diciembre de 2024, donde la tasa de desempleo se redujo significativamente hasta un 9.6%. Esto representa una disminución de 1.8% frente al mismo período en 2023, lo que indica una tendencia positiva en la generación de empleo a lo largo del año.
Por otro lado, el crecimiento de los ocupados en el sector de servicios, y en particular en áreas relacionadas con el comercio y la gastronomía, pone de manifiesto el rol crucial que estos sectores juegan como motores de desarrollo económico en el municipio. Sin embargo, las caídas en sectores clave como la construcción y la agricultura, sumadas a una leve disminución en la información y las comunicaciones, podrían estar señalando un cambio en las dinámicas productivas de la región.
Es clave seguir monitoreando este comportamiento y analizar si estas cifras reflejan una tendencia sostenida o si están relacionadas con factores coyunturales. No obstante, el 2024 ha sido un año en el que Armenia ha demostrado signos claros de dinamismo laboral, lo cual es una excelente noticia para la economía local y los ciudadanos que, a pesar de los retos, han logrado encontrar mayores oportunidades de empleo.
Este panorama permite ser optimista, pero también hace un llamado a la reflexión sobre la diversificación de los sectores productivos de la ciudad, para consolidar un crecimiento sostenible y equilibrado que no dependa exclusivamente de sectores específicos, sino que abarque la variedad de actividades que configuran el tejido económico de la región.