29 de marzo de 2024

Juli grandioso como siempre

Por Carolina Baquero
7 de enero de 2017
Por Carolina Baquero
7 de enero de 2017
El Juli

por Carolina Baquero
La Mejor Revista de Toros

Bajo un torrencial aguacero se llevó a cabo la tradicional ceremonia del Festival Taurino, homenajeando a la Virgen de La Macarena, con los farolitos encendidos. Afortunadamente después del primer toro, la lluvia finalizó y se pudo vivir un agradable festejo.

Se lidió un encierro de novillos toros de Ernesto Gutiérrez de buena presentación y un juego muy complicado. El único sobresaliente fue el lidiado en tercer lugar por parte de Julian López, quien a su vez cortó las únicas orejas de la noche.

En El Centro del redondel ejecutó toda su faena el bogotano Pepe Manrique, quien lidió a un toro noble, atento, repetidor aunque sin terminar de entregarse en cada pase, cortito de embestida y con la cabeza a media altura. La actuación de Manrique fue sobresaliente toreando muy ligado por los dos pitones, emocionando a los tendidos. Estocada trasera y tendida, y estocada completa en buen sitio. Fuertes palmas tras aviso.

Morante de la Puebla mediante estatuarios dio inicio a una faena que debía ser más técnica que artística, debido a las condiciones del toro que llevaba su cara a media altura durante los pases y al final trompicaba la muleta, tuvo que torearlo de uno en uno, y cortitos los pases para no agotar el poco recorrido del astado. Los mejores muletazos se los vimos con la mano derecha, lastimosamente no se pudo ver una faena de transmisión o con un horizonte claro. Estocada hasta la empuñadura. Saludo desde el tercio.

La afición de Manizales se deleitó viendo torear a Julián López “El Juli”, que estuvo enorme desde el capote, la suavidad de su toreo y lo excelso de su arte; fueron el gozo de los taurinos. El toro fue noble, bondadoso, que fue a más pero con la carita a media altura y a veces queriéndose recostar sobre el cuerpo del torero; quien ejecutó una faena completa, larga, ligada, templada y dándole el espacio necesario al toro para no ahogarlo. Pinchazo y estocada en lo alto pero traserita. Dos orejas y palmas al toro.

El francés Sebastian Castella no pudo estay muy a gusto con el cuarto de la noche, que era tardo, gazapón y con nada de recorrido. Todo lo puso el de Beziers,quién después de brindar a los monosabios, trató de someterlo mediante doblones y luego bajando la mano para invitarlo a humillar pero no lo consiguió. Pinchazo, media espada trasera y estocada trasera efectiva. Palmas.

Miguel Ángel Perera conectó de inmediato con el público de la capital caldense, desde la capa y luego en El Centro del ruedo con la muleta y unos bien ejecutados cambiados por la espalda. El toro con embestida áspera, bronca y que manchaba la limpieza con la que quería Perera torearle, en algunas tandas con la derecha que no pudieron ser muy largas, ampliaba su figura, estirando el brazo para ejecutar una faena con temple y mando. Tres cuartos de espada en buen sitio aunque algo perpendicular y descabello. Saludo desde el tercio.

Luis Miguel Castrillón sustituyó a Roca Rey quién salió herido en su gemelo izquierdo el día de ayer. El toro que le correspondió al antioqueño salió huyendo de la pica y casi imposible era ponerle las banderillas por su condición de abanto. Pasaba a alta velocidad por la muleta de Luis Miguel, cuando quería, porque casi siempre huía a tablas y aunque el torero lo buscó para darle la lidia en su querencia, no pudo hacer más que después de algunos pases, tomar la espada para pasaportarlo. Estocada en buen sitio, tres intentos de descabello, pinchazos, estocada delantera y baja. Palmas cariñosas por su voluntad y pitos al toro.

Cerró la noche el rejoneador español Pablo Hermoso de Mendoza logró fijar en sus cabalgaduras a un novillo toro que fue de menos a más, pues en sus inicios no quería atender con continuidad a las jacas toreras. Durante el tercio de banderillas estuvo el mayor esplendor de la lidia, allí logró torear muy templado al toro y llevarlo en varias ocasiones a recorrer circularmente el ruedo. Después del segundo tercio, salieron al ruedo un grupo de los más famosos forcados portugueses que gustaron mucho en la realización de las tradicionales pegas lusitanas. Mal tercio de muerte. Palmas.