Las otras dimensiones de la realidad que no observamos
…si bien desde la astronomía y ciencias afines realmente enfocamos la educación escolar a desarrollar parcialmente las competencias básicas, puesto que priorizamos el razonamiento matemático, la comprensión física y la informática, e incluso el lenguaje y la cultura, pero poco hacemos por los objetivos educacionales para la incorporación de otros aprendizajes y desarrollo de capacidades de asociación en competencias relativas a la dignidad, la tolerancia, el respeto por la vida, la democracia, la justicia social y la vida ciudadana.
Posiblemente nuestra formación, sesgada hacia las ciencias exactas y físicas, también ha inficionado nuestra cultura y sesgado nuestra visión del mundo, a tal punto que no alcanzamos a dimensionar la percepción newtoniana de las ciencias naturales: efectivamente, cuando Newton aludió a la naturaleza de la fuerza que explica la atracción de los cuerpos celestes, tuvo la genialidad de añadir que “no existía causa”, por lo que una de las consecuencias de haber formulado la Ley de la Gravitación Universal, es haber establecido una lógica diferente en la manera de plantear los problemas. De la misma forma, al abordar la enseñanza de nuestras materias, deberíamos tratar el contexto histórico de los fenómenos y hechos sociales del respectivo tema, para reflexionar sobre las consecuencias de las acciones antrópicas que lo acompañan y encontrar la relación de nuestro saber con las ciencias sociales y del comportamiento, para ver esa realidad que no observamos.
Con esa perspectiva al examinar dicho contexto seguramente encontraremos otras dimensiones, así la relación resulte más compleja. Por ejemplo, dicha lectura nos dará una visión más clara de la problemática ambiental reflejada en el tema de la destrucción de los recursos naturales, la polución del aire y la contaminación de suelos y aguas, como factores de la destrucción de la biodiversidad; o si se quiere, encontraremos relaciones insospechadas de nuestros temas con los asuntos del crecimiento poblacional, el cociente de alimentación, la producción industrial y el crecimiento económico, todo esto necesario para motivar y preparar mejor al educando, y enfrentar con nuestra misión educativa mediante la instrucción y la formación a largo plazo, los asuntos de pobreza, corrupción, drogadicción y violencia.
Desde el OAM, Gonzalo Duque-Escobar. Ed. RAC 571.