La polémica ley SB 1070
La medida además de discriminatoria, tiene desde ya repercusiones en la Casa Blanca donde el presidente Barack Obama, estudia medidas alternativas que contribuyan a “encaminar mejor” la determinación para bajar las tensiones que han surgido con el gobierno de uno de sus países aliados como lo es México.
Lo más interesante de toda la situación gira alrededor de la serie de demandas que la bancada latina del Congreso de los Estados Unidos, encabezada por los congresistas Luis Gutiérrez, Raúl Grijalba y Ed Pastor está preparando contra la ley SB 1070, contra sus ponentes y contra la propia gobernadora del estado de Arizona, Jan Brewer.
Aunque los motivos exactos para la promulgación de la ley estatal no han sido muy claros, dejan pensar que las autoridades del Estado olvidaron de un momento a otro, que el desarrollo agrícola del sur del país, se mueve fundamentalmente gracias al talento y a la labor constante de la mano de obra de los hispanos, que para esta zona está compuesta especialmente por guatemaltecos, hondureños y mexicanos, que documentados o indocumentados le prestan su mejor concurso a la economía estadounidense.
Es un caso muy similar al que se registra en Colombia, donde varios de nuestros compatriotas gracias a su tesonera labor, conocimiento y empeño, prestan un eficiente servicio a las economías limítrofes de Panamá, Ecuador y Venezuela.
Gracias a esta voluntad de trabajo de ingenieros, arquitectos, albañiles, plomeros y electricistas, entre otros, Panamá y su capital son ejemplo de desarrollo para el área centroamericana en lo relacionado con la construcción de grandes edificios, utilizando la “mano de obra” colombiana.
Hace un par de años quizás un productor de cine de los Estados Unidos, anticipándose a la situación que hoy se registra, puso en el mercado del séptimo arte la obra titulada “Un día sin mexicanos”, donde se demuestra la manera como decaen las industrias, la agricultura y los servicios en general, en las zonas limítrofes donde los inmigrantes hacen las labores que la mayoría de los norteamericanos desprecian.
La nueva ley SB1070 que criminaliza al inmigrante por “sospecha de que está indocumentado”, prendió las alarmas en los gobiernos de México y Centroamérica en general, que desde ahora preparan un reclamo formal a los Estados Unidos por la posición asumida por el gobierno del estado de Arizona.