AYER, HOY Y MAÑANA (2)
Por Sempronio Daroca
Lo que más me ha fascinado de este mi país, es el desparpajo y las ganas de vivir de la mayoría, la inmensa mayoría de sus gentes. Uno llega y comienza a mirar para todos los lados a esperar la puñalada o el balazo y lo único que recibe es afecto y simpatía.
Así lo he sentido por parte de mis parientes manizaleños y como estaré por aquí unos ocho meses voy a ver si de igual forma me reciben mis primos de Bogotá, Palmira y Sahagún, que son los sitios donde gastaré mi año sabático.
En una pared leí que "El país se derrumba y nosotros de rumba". Bravo. Nada se consigue con fruncir el ceño si no se tienen las soluciones a la mano.La Feria de Cali, la de Manizales, ahora el Carnaval de Barranquilla, contaron y contarán con marejadas de colombianos dedicados al jolgorio. Los extranjeros que se atreven a venir a Colombia, se quedan con la boca abierta, a los dos días meten sus chalecos antibalas a la maleta y se dedican a la juerga, a veces con exageraciones estimulantes y sexuales que les ofrecen a la vuelta de la esquina. Como en todas partes del mundo. Si uno lo apetece, en las calles de Nueva York, de Roma , de Budapest, de Berlín, consigue lo que quiere.Si tiene dinero, desde luego, porque los placeres no se los dan a uno de gratis.
Pero a lo que iba, es que veo en los periódicos y revistas notoria preocupación por lo que digan o no digan , hagan o no hagan, las gentes que salen en la televisión. Y encontré en El Tiempo un titular que de entrada no me dijo nada, pero que me intrigó:"Acuerdo entre actrices. Marcela Mar (foto) se retractó de lo que dijo de Sara ".(Sic).A Sara (foto, abajo), supuse, la debe conocer todo el mundo,así como así:Sara. Como decir Pastrana. O Da Vinci. O Einstein. o Uribe. Pues nó. Seguí leyendo y se trata de una actriz paisa,bellísima eso sí, que puso a prueba la fidelidad de un afamado actor, quien sucumbió a sus encantos, como yo lo hubiera hecho. Y de Marcela Mar, otra actriz, quien se atrevió a cuestionar el estereotipo de belleza de Sarita (!) y por eso la llevaron a los tribunales. De acuerdo con lo que investigué, Marcela Gardeazábal, que así se llama la Mar, dijo que la Corrales , su belleza,era de quinta categoría, la forma como se vestía y su estética general la de una mujer prepago (voy a preguntar que es este calificativo y depués les cuento) y que no quisiera que una hija suya fuera así.Además, en un correo electrónico proveniente de un perfil de facebook denominado Marcela Mar, se le trata de "maldita perra y quitamaridos ." Y quien dijo Troya: Sarita (!) se
consiguió un joven y exitoso Abogado, De la Espriella, que le hizo tragar las palabras a la Gardeazábal, quien se retractó de todo lo dicho, y llegó la anhelada paz.Marcela Mar se presentó ante el juez con su figura diminuta, su bellísima carita, su atuendo de encopetada dama y expresó que había sido mal interpretada y que bla bla ,bla, bla. Que par de mujeres tan apetitosas. Si me dieran a escoger entre las dos, me quedaríá con ambas. Los Abogados se dieron las manos, las actrices se besaron en las mejillas y el país respíró tranquilo.Se quedó atrás el asesinato del Gobernador del Caquetá, lo del salario mínimo , lo de Haití ,lo de la reelección y todo lo demás. Marcela Mar y Sara,Sarita para nosotros sus obsecuentes admiradores,ya comen en el mismo plato. Y, Sarita(!) , ¿dónde estás?