21 de mayo de 2025

La eterna candidata

17 de noviembre de 2009
17 de noviembre de 2009

En el año de 1998 se lanzó la señora en cuestión como candidata independiente a la presidencia, en virtud del respaldo que el partido conservador le dio a Andrés Pastrana. En esa ocasión tuvo el respaldo del dirigente conservador Valencia Cossio, pues a éste le interesaba que su pupilo, Juan Camilo Restrepo entrara a jugar como candidato del partido azul. Pastrana obtuvo el triunfo sobre el liberal Horacio Serpa y la entonces candidata independiente es nombrada en la Embajada del Reino Unido, de donde regresará para iniciar su papel de candidata a la presidencia de la República, enfrentando al entonces candidato de coalición,  Álvaro Uribe.
Durante la campaña política en el 2002, tuvo serios enfrentamientos con el candidato Uribe y con la dirección del periódico El Tiempo, por favorecer los intereses de Francisco Santos (¡Tan raro!). También en esta ocasión obtuvo inicialmente el favor del doctor Valencia Cossio, porque aún no se mostraba la fuerza electoral de Uribe con toda su plenitud.
Derrotado nuevamente la doctora Nohemí, regresó al oficio de embajadora en España y luego en el Reino Unido, defendiendo a capa y espada al presidente Uribe con el fin de que fuera reelecto y de esa manera asegurar su cargo diplomático. Actitud muy humana, por cierto, en un país en donde hay tanto desempleo.
Pero ahora resulta que la doctora Nohemí vuelve al ruedo y se presenta en la plaza pública con un discurso que enfrenta la política del presidente Uribe y considera que no está conforme con más reelecciones. En fin, todo pudiera indicar que la luna de miel con el presidente Uribe se acabó, pero como al pastorcito (pastorcita) mentiroso, ya nadie le puede creer tanta belleza cuando habla de independencia y de recuperar el poder para un partido político en el cual militó cuando le convino y  abandonó cuando las circunstancias así lo exigieron para presentarse como independiente.
¿Será posible que dentro del partido conservador pueda tener la doctora Nohemí algún grado de credibilidad? Algunos amigos me dicen que si han adoptado al doctor Merheg, el hermano del exsenador, no tiene nada de raro que se siga pensando que ahora  le llegó el momento a la doctora Nohemí, de abandonar su ya largo peregrinar como embajadora, para instalarse en la Casa de Nariño y exclamar como aquel presidente liberal: “Aquí estoy y aquí me quedo”.