28 de marzo de 2024

Un adiós con llanto, música y aplausos

5 de octubre de 2009
5 de octubre de 2009

Problemas hepáticos y renales ocasionaron el fallecimiento de la popular cantante tucumana, a los 74 años. Si bien la noticia era esperada en los últimos días, cuando su salud se agravó hasta el punto de ser sostenida sólo con asistencia mecánica, el deceso conmocionó a ciudadanos, artistas y a dirigentes políticos de la Argentina y del exterior.

La magnitud de su trayectoria llevó a que el velatorio se realizara desde el mediodía de ayer en el Congreso de la Nación y con honores de embajadora. Por el Salón de los Pasos Perdidos, donde no faltó música, aportada por los hermanos Carabajal, Piero, Teresa Parodi y el Chango Farías Gómez, en un homenaje que cosechó aplausos, fue incesante el desfile de personas. Pasaron artistas que supieron compartir escenarios con ella y miles de ciudadanos que disfrutaron de su voz.

La presidenta Cristina Fernández también se acercó al velatorio junto su marido, Néstor Kirchner, y saludó a los familiares de la cantante. Antes había firmado un decreto para declarar el duelo nacional por la muerte de Sosa. Por ello, la bandera argentina será izada a media asta como símbolo de respeto y despedida para la artista popular.

Su hermano Orlando Sosa explicó que los restos serán cremados hoy en el cementerio porteño de la Chacarita y las cenizas, esparcidas en Buenos Aires, Tucumán, su ciudad natal, y en Mendoza, donde vivió en los años 60 cuando fue protagonista del Nuevo Cancionero del folklore nacional.

La última internación de Sosa se convirtió en una larga vigilia, a la espera de lo peor. Cuando se supo de la gravedad de su estado de salud, la cantante llevaba once días internada en el Sanatorio de la Trinidad, en Palermo. Si la noticia trascendió fue porque los problemas hepáticos que padecía afectaron los sistemas urinario y respiratorio de su organismo.

Desde ese momento, se sucedieron la vigilia y las declaraciones de músicos y amigos de la cantante, muy preocupados por su estado de salud. El viernes recibió la visita en el sanatorio del padre Luis Farinello, para darle la unción de los enfermos.

Sus últimos álbumes

Era difícil imaginar este desenlace por quienes hasta hace algunas semanas la veían alegre por la salida de los que serían sus dos últimos álbumes, Cantora 1 y 2 . Imágenes que ahora pueden verse en YouTube la muestran en el backstage de las grabaciones con los artistas invitados. Ahí está "la Negra" bailando con Charly García. Ahí también está la cantora, que larga una carcajada cuando Luis Alberto Spinetta le dice: "¿Sabías que estoy saliendo con Britney Spears?". Y ella, que se engancha, le sigue la corriente. "Es probable", le dice.

Pero evidentemente la procesión iba por dentro. En 1998, cuando se preparaba para presentar su disco Al despertar , le contaba al periodista René Vargas Vera que había pasado 5 meses postrada en la cama: "Mi punto débil fue el esófago, donde se radicó lo que se llama «depresión enmascarada», algo no consciente, algo que no se puede manejar. En mi caso, es el resultado de un cansancio de años. Cuando me enfermé, estaba a punto de iniciar una nueva gira internacional que demandaba dos cruces del océano. De Vancouver, Dallas, Nueva York a festejar mis treinta años [de carrera] en París; de allí a México, Puerto Rico, Miami, Washington. Tuve miedo de tener cáncer. No tenía fuerza para nada. Y no quería vivir así".

En 2003, la historia se repitió. Debió suspender el espectáculo Argentina quiere cantar , con Víctor Heredia y León Gieco. Este año, a punto de presentar su nuevo disco, otra vez la salud la dejó sin canción. Pero su voz, inmortal, permanecerá intacta en sus grabaciones y en la memoria de todo un pueblo que desde ayer la llora.