Andrés Mauricio Vega, ejemplo de progreso y superación personal
«El Sena es una entidad muy importante porque nos ha apoyado mucho en cuestión de estudios y todo. Allá estudié tres meses y ya en Busscar de Colombia estuvimos haciendo la práctica por seis meses y gracias a mi buen trabajo me quedé aquí como empleado de planta», afirma Andrés, quien, gracias a la formación impartida por esta entidad del Gobierno, ha logrado cambiar su vida.
Hace dos años, Andrés era un desempleado más. «Era muy difícil porque no tenía trabajo y tampoco tenía oportunidades por mi condición. Yo vivía en Palmira y por nada del mundo podía encontrar trabajo. Por eso me tocó venir aquí a Pereira», recuerda.
Sin embargo, la historia de Andrés Mauricio Vega va mucho más allá de ser un colombiano que encontró apoyo en una entidad del Gobierno para superarse y estudiar.
«Cuando estaba en el vientre de mi madre, ella sufrió de sarampión, y por eso nací sordo. Soy sordo profundo, no escucho nada, nací así», expresa Vega mientras muestra su brazo señalando las venas, lo cual, según el lenguaje de señas, significa parentesco, consanguinidad.
Él hace parte de un grupo de personas con discapacidad que trabajan en esta empresa y que, gracias a diferentes capacitaciones, han ascendido dentro de la misma.
«Al principio era difícil con los oyentes. Yo sentía que me rechazaban porque ellos escuchaban y yo no sentía nada, ni escuchaba nada, pero después de estar trabajando me acostumbré a ellos, y ya poco a poco les he enseñado también el lenguaje de señas y me comunico mucho mejor con ellos», afirma.
Andrés considera que hoy su discapacidad no es un impedimento para salir adelante. «La experiencia que tengo me hace independiente, no tengo que depender de nadie. Al principio fue difícil, pero ahora soy un líder porque les enseño a mis compañeros cómo hacer las cosas», dice.
«Algunos no saben palabras como tal, pero me esmero y me esfuerzo por enseñarles para que ellos aprendan y me entiendan qué es lo que necesito en cuestión de soldadura. Yo me he vuelto experto y miro a ver cómo me hago entender. Soy muy independiente», agrega.
Con un sinnúmero de señas y sus expresivos ojos negros, se hace entender y tiene claro que su discapacidad no ha sido un obstáculo para trabajar, aprender y ser cada día mejor.
«El cambio que he tenido ha sido impresionante porque, pese a que soy una persona sorda, tengo los mismos derechos de una persona oyente. Soy un líder y apoyo a otras personas», indica.
Andrés Mauricio planea continuar creciendo, aprendiendo y hasta enseñando. «Ahora aquí están haciendo prácticas algunos del Sena y yo me les acerco y les explico, les digo que estén tranquilos, para que hagan su trabajo y sean como yo, quien poco a poco fui aprendiendo, para que puedan quedar vinculados a la empresa», señala.
El Presidente Juan Manuel Santos visitará este jueves la empresa donde trabaja Andrés Mauricio. Allí se realizará un evento que promueve el apoyo a los empresarios para la generación de empleo. Para Vega, este es «uno de mis sueños hechos realidad, nunca me imaginé poder conocer al Presidente en persona».