3 de octubre de 2024

Cinco ex secuestrados se lanzan al ruedo político

13 de septiembre de 2009
13 de septiembre de 2009

 

Arriba. Sigifredo López y Luis Eladio Pérez. Abajo. Jorge E. Gechem y Consuelo González.

Una de las más llamativas es el regreso de algunos de los ex secuestrados al ruedo político. Este fue un tema que quedó en el aire desde las liberaciones unilaterales por parte de las Farc, que se iniciaron en 2007, y que sólo hasta ahora empieza a decantarse.

Hasta el momento cinco de ellos anunciaron que perseguirán una curul en el Congreso, según afirman, porque tienen una deuda moral con el país y porque buscan recuperar la imagen de esa corporación, tan cuestionada por escándalos como la ‘parapolítica’.

El Partido Liberal es el que más ex plagiados concentra. Los ex parlamentarios Consuelo González de Perdomo, Orlando Beltrán y el único diputado sobreviviente de los once secuestrados del Valle, Sigifredo López, militarán de nuevo en sus filas, buscando llegar al Senado.

Luis Eladio Pérez, en cambio, optó por acompañar al candidato independiente a la Presidencia, Sergio Farjardo, quien se encuentra en el proceso de recolección de firmas para validar su aspiración. Pérez también buscará una silla en el Senado.

Por su parte, el ex senador liberal Jorge Eduardo Géchem, enfilará baterías con la U para respaldar la tercera candidatura del presidente Álvaro Uribe Vélez.

En este aspecto discreparon sus cuatro colegas quienes mostraron sus reservas frente a una posible nueva reelección.

Sin embargo, sí hay temas en los que están de acuerdo los cinco. La recuperación del protagonismo de las regiones a la que cada uno pertenece y la búsqueda de un acuerdo humanitario entre las Farc y el Gobierno colombiano son el común denominador en las campañas de los antiguos cautivos.

Algunos especialistas afirmaron ver con buenos ojos este regreso de los ex secuestrados a la política, ya que consideran que permitirá una mirada más sensible frente a problemáticas que aquejan al país.

“Ellos eran políticos antes del secuestro, lo fueron durante el cautiverio y lo son ahora. No es raro que quieran participar del proceso electoral. Es además, muy interesante ver qué van a hacer en el Congreso, ya que todos vivieron en carne propia un drama que afecta al país como lo es el secuestro”, aseguró el analista político Ancízar Marroquín.

En este último punto se mostró de acuerdo el ex alcalde de Bogotá, Jaime Castro, para quien las candidaturas no sólo son válidas sino, hasta cierto punto, necesarias.

“Es magnífico que estén en el Congreso y que impulsen el acuerdo humanitario. Podrían no sólo lograr más liberaciones sino incluso erradicar el secuestro”, señaló.

Luis Eladio Pérez

1. Porque pienso que desde la actividad política uno puede aportar un grano de arena a la construcción de la paz en Colombia y arrancar a reconstruir el país.

Desde la política se debe combatir la exclusión, la miseria y el hambre que al final son el caldo de cultivo que alimenta la violencia y los ex secuestrados tenemos una deuda grande.

2. Mi familia, por supuesto, tiene muchas reservas con respecto a esto y me exigieron las prevenciones mínimas para evitar que se vuelva a presentar el drama del secuestro. Por mi parte, sí tengo temor, desde luego, pero mi responsabilidad es grande y creo que eso vence el miedo.

Cuestionario 1. ¿Por qué decidió regresar a la política después de su liberación? 2. ¿Qué opina su familia de que retorne a este escenario?, ¿y no siente temor de que se repita el drama del secuestro? 3. ¿Cómo ha cambiado el panorama político desde la fecha de su secuestro a hoy en día? 4. ¿Qué opinión le merece la intención de la bancada uribista de que el Presidente sea reelegido para un tercer periodo?

3. En esta última década la política ha empeorado. La corrupción sigue campeando. Es triste ver a 102 congresistas cuestionados por la ‘parapolítica’.

Yo hubiese deseado que en estos ocho años de ausencia se hubiesen generado procesos de renovación, pero pasó lo opuesto y es muy triste ver eso.

Tengo confianza que con Sergio Fajardo las cosas pueden cambiar. Es un hombre honesto y que tiene muchos deseos de trabajar. No está contaminado con esa politiquería.

4. La reelección por tantos periodos es perjudicial para un país, para el mandatario que repite y lo peor, para la democracia. Uribe tuvo un primer gobierno muy bueno y logró enormes éxitos en el campo económico y en la seguridad, eso nadie se lo quita, pero yo creo que ya es hora de que se le dé la oportunidad a una nueva generación de personas que tiene también ideas y que puede airear la política colombiana.

Sigifredo López

1. Porque toda mi vida me he preparado para ejercer la política, entendida como un oficio a través del cual se solucionan problemas generales. A través de la política se diseñan soluciones y hay un compromiso con ellas.

Entonces, yo me he caracterizado por ser un ciudadano participativo y lo que busco al aspirar al Senado es que en mi rol de víctima pueda luchar por dar las oportunidades que yo no tuve por estar en cautiverio.

2. En el caso de mi familia ellos me apoyan porque saben que soy un político de vocación y desde el primer primer día de mi liberación dije que probablemente regresaría a este escenario. Es que yo no podía irme a la selva abogado y político y volver ingeniero. Soy lo que soy. En mi caso, claro que tengo miedo de que se repita el horror, pero no puedo dar marcha atrás y dejar de actuar. Esta es mi misión en la vida.

3. La política de hoy es la de ayer: los mismos con las mismas. Desde que volví vi a la misma clase política gastada, defendiendo los espacios a codazos. Los veo pegados como garrapatas, pensado que la Administración es una vaca a la que se le chupa sangre. Veo la misma mediocridad, clientelismo y corrupción de hace ocho años.

4. El Estado colombiano fue diseñado para que no hubiera reelección y al producirse la primera vino un desequilibrio de poderes que no es bueno. Una segunda reelección agravaría ese problema y no estoy de acuerdo.

Jorge E. Géchem

1. Siempre la política ha sido mi vocación. Desde que soy muy joven he estado en el ejercicio. Al momento de mi secuestro llevaba 20 años en ese escenario, trabajando. Yo creo que una herramienta vital para ayudar a las personas, a las regiones. Es hora de que rescatemos al Huila, al Putumayo de la crisis en la que la ha sumido esta terrible situación de violencia de los últimos años. Lo que quiero ahora es que mis energías estén puestas en eso, en rescatar a Colombia de esta situación de desconfianza política.

2. A mi familia le tuve que decir que no había otra alternativa. Lo que quiero es morir haciendo política. Sé que mi secuestro fue por esa razón, pero confío en Dios y esta es una segunda oportunidad que tengo de hacer lo que amo. No puedo dejar de sentir temor, mentiría al decir que estoy envalentonado, pero sin duda me puede más la pasión por esta labor tan bella.

3. Las circunstancias han variado de forma tangencial. Por poner un ejemplo, cuando a mí me secuestraron, Uribe era precandidato y entonces tenía una aceptación del 7%, hoy tiene el 70%.

Pero, debemos buscar fortalecer la labor del Presidente al sanear el Congreso para que casos tan bochornosos como el de la ‘parapolítica’ no se repiten. Eso afecta la institucionalidad de Colombia y hace que la confianza política de los ciudadanos se caiga al suelo.

Espero que podamos hacer un cambio a esa situación.

4. La Seguridad Democrática y su concepción de pulso firme son un éxito en Colombia. Yo aspiro a contribuir a eso. Por esa razón estoy de acuerdo con que Uribe siga en el poder. A lo que sí hago un llamado es a que las Farc y el Gobierno busquen una salida negociada al conflicto armado.

Consuelo González de Perdomo

1. Para mí la política es el mecanismo más indicado para ofrecer un buen servicio a la comunidad. Regreso de mi cautiverio y después de un año de reflexión y contactos con la gente del departamento del Huila, entendí que necesitaba seguir sirviendo a la gente y lo haré desde el Congreso.

2. Para mi familia fue muy difícil hacerles entender mi regreso al ejercicio de la política. Yo entiendo sus temores, son muy válidos. Pero fueron muy respetuosos. El temor es latente siempre y yo lo siento cada día. Pero, en este caso no soy sólo yo, es toda una región la que necesita una voz y allí dejo mi miedo a un lado, porque ya no se trata solamente de mí sino de millones.

3. La política tuvo un vuelco total hacia lo negativo en estos últimos ocho años. Se ha vuelto común que la política sea un comercio. Han desaparecido en gran parte del país las convicciones políticas, los ideales y todo se ha centrado en el qué consigo y en el qué me pueden dar. Es una lástima, porque años atrás había un sentido para hacer política, uno de desarrollo social. Regreso porque así seamos dos o tres que tengamos un criterio diferente podemos empezar un cambio.

4. Primero quiero aclarar que mi militancia en el Partido Liberal no me pone en la oposición.

Entonces, creo que la reelección no es conveniente, no porque sea Uribe quien la busque, es porque la institucionalidad se afecta. Yo soy una convencida de que nada de esto es conveniente para la Nación, tanto en aspectos de política interna como en la externa.

Orlando Beltrán

1. Volver a la política es un deber moral que tengo porque soy una persona que sufrió en carne viva la violencia de este país. Lo que quiero es aportar a que Colombia tenga una esperanza y mire hacia el futuro. Yo soy un convencido de que con un Congreso como el que tenemos hoy este país no tiene futuro y si regreso a la política es para cumplir mi responsabilidad.

2. Claro mi familia me dice que estoy asumiendo un actitud valiente pero llena de riesgo. Yo tengo temor, eso es innegable, pero la Colombia que necesitamos no se puede construir con personas que tengan carácter fuerte y decidido. Ahora debo pensar en el porvenir del país que en mi propia ambición personal.

3. Ha cambiado mucho. Ya cada vez hay menos gente que haga propuestas y que busque alternativas de cambio. El clientelismo ha aumentado de forma exponencial. Tenemos un Congreso que infortunadamente busca responder a sus propios intereses, lejos de aportar algo al país. Ya no se quiere cambiar a Colombia y eso es más que triste. Estamos atravesando por una crisis, pero no estamos en una bancarrota social. Todavía se pueden hacer partidos con alma.

4. Cuando un funcionario es bueno, debe ser reelegido. si está haciendo una buena gestión administrativa, para qué cambiarlo. Con lo que sí no estoy de acuerdo es en que se apruebe en el Congreso una reelección tan llena de vicios, que deja mucho que desear.