2 de diciembre de 2023
Columnistas
Sí, padecemos muchos males y los criticamos siempre. Desde luego que nos negamos a ser partícipes de las decisiones que se toman sobre los problemas nacionales y, por una u otra razón, quienes se catalogan como líderes, aparecen guardando silencio sobre lo que se hace o dice en las altas esferas del poder.
Es tiempo de fútbol. Durante un mes vamos a estar con los ojos como unas redes, después de los banquetes diarios que nos ofrecerán la radio y la televisión La política pasará a segundo plano y en todo el mundo sus líderes y actores pasarán al closet, para después salir con mas bríos y entusiasmos.
Un peluquero arribista, Palemón el Estilista, tacha mis escritos. Yo no me inclino ante los burgueses ni busco sus bendiciones como este gacetillero de poca monta. Si él pinta uñas, y le hace moños a las niñas bonitas de la oligarquía, yo soy un zapatero que vivo al dia. Me llegan las revistas, leo la Patria, estoy al tanto de lo que se publica en Eje 21.
En realidad no me gusta ver cómo los centros comerciales se fueron adueñando de nuestras ciudades desde que Unicentro llegó a Bogotá en 1976. Sus habitantes, y todo aquel que viajara a la capital, iban en romería al centro de marras que ofrecía variadas novedades, además de cierta sensación de seguridad en su interior. Pronto vino una verdadera eclosión de estos establecimientos en la capital del país, luego, en Cali y Medellín.
Esta clase de propuestas solo las hacen quienes no tengan la más mínima brizna de pudor, y deben ser rechazadas de plano, máxime si estas son formuladas por ciertos politicastros que manejan espuriamente los hilos del poder político y que, sin sentir respeto por los demás, se atreven sin recato alguno y de manera muy propia del sátrapa a imponer ciertos candidatos a cargos de elección popular que no llenan la expectativa que se espera.
Después de la bilis que derramó contra Luis Alfonso Hoyos, se vino el tal Luciano de la Congoja contra el actual Alcalde de Manizales, al que señala como el único autor de la " galerización " de nuestra carrera veintitrés y calles aledañas. No creo que el joven Rojas, lea al acongojado columnista ni a mí, pero ojalá le cuenten que yo salí a defenderlo.
Terminado el trámite del acto legislativo de la mal llamada reforma de equilibrio de poderes en donde se mezclaron temas políticos, electorales, y de justicia, que nos servirá de materia prima para próximas columnas, el país se apresta a presenciar otro debate.
