Reclusos en Pereira abren paso al emprendimiento

Pereira, 19 de diciembre de 2024. Un nuevo capítulo en la resocialización de personas privadas de la libertad se escribe en Pereira con la clausura del programa Ruta de Emprendimiento en el Centro Penitenciario La 40 y la reapertura de la tienda Libera, un espacio destinado a la venta de productos elaborados por los internos. Estas iniciativas buscan trascender la visión tradicional de los sistemas penitenciarios al poner el foco en el desarrollo personal y económico de quienes cumplen condena.
En el programa, liderado en conjunto por el SENA y el INPEC, participaron más de 80 internos que durante meses recibieron capacitación en habilidades empresariales y técnicas, orientadas a fomentar su integración social y laboral una vez recuperen su libertad.
La tienda Libera: más que un punto de venta
El resurgimiento de la tienda Libera, que estuvo cerrada por más de cuatro años, marca un paso significativo hacia la reinserción social. Este espacio no solo permite que los internos comercialicen sus productos, sino que también funciona como un símbolo de sus esfuerzos por superar el estigma asociado a su situación judicial.
La rehabilitación de la tienda fue posible gracias a una inversión conjunta que involucró materiales aportados por entidades externas y mano de obra suministrada por los mismos internos, quienes trabajaron bajo la supervisión del personal del INPEC y expertos en diseño y artesanía.
Los productos, que abarcan desde piezas decorativas hasta artículos utilitarios, reflejan el talento y dedicación de quienes buscan reconstruir sus vidas. Este esfuerzo no solo beneficia a los internos, sino también a sus familias, que encuentran en estas iniciativas una esperanza de estabilidad económica.
La resocialización como eje de transformación
El capitán Mauricio Andrés Erazo Rosero, director de la cárcel, destacó que el programa no solo brinda herramientas prácticas a los internos, sino que también fomenta valores como el trabajo en equipo, la disciplina y el compromiso. “La Ruta de Emprendimiento ha sido un puente hacia nuevas oportunidades. Estos proyectos demuestran que, con el apoyo adecuado, las personas privadas de la libertad pueden convertirse en ejemplos de superación”, afirmó.
Por su parte, familiares de los beneficiarios también han valorado el impacto de estas iniciativas. Edith Solís Suta, madre de uno de los internos, expresó: “Esto no es solo un programa, es una ventana de esperanza. Mi hijo ha cambiado su perspectiva de vida, y ahora siente que puede aportar algo positivo a la sociedad”.
Una invitación a la comunidad
La tienda Libera estará abierta al público de lunes a viernes, ofreciendo productos únicos que no solo representan la creatividad de los internos, sino también su esfuerzo por redimir sus errores. La invitación está abierta para que la ciudadanía apoye esta iniciativa, contribuyendo a un modelo de justicia que prioriza la restauración sobre el castigo.
Con proyectos como este, se refuerza la idea de que la resocialización no es un ideal abstracto, sino un proceso tangible que, cuando cuenta con las herramientas adecuadas, puede transformar vidas y comunidades enteras.