17 de enero de 2025

Editorial Ante el declive del recaudo tributario, ¿será la nueva reforma un remedio peor que la enfermedad?

Por La Redactora
27 de septiembre de 2024
Por La Redactora
27 de septiembre de 2024

La caída del recaudo tributario en Colombia durante agosto ha encendido las alarmas. En este contexto, la propuesta del Gobierno de implementar una nueva reforma tributaria ha generado más controversia y preocupación. ¿Será esta la solución que el país necesita o un paso en falso en un terreno ya complicado?

 

Colombia enfrenta un momento crítico. El recaudo tributario, vital para las finanzas públicas, ha caído en agosto un 30,8% en comparación con el mismo periodo de 2023. ¿La causa? Una combinación de factores que incluyen la desaceleración económica y problemas de gestión en la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN).

Las consecuencias de esta situación son alarmantes. Menos ingresos en las arcas estatales se traducen en menos recursos para salud, educación, infraestructura y otros servicios esenciales. Además, pone en riesgo la estabilidad económica del país y puede desencadenar una espiral de deuda difícil de controlar.

Ante este panorama, el Gobierno ha propuesto una nueva reforma tributaria como solución. Sin embargo, esta medida ha generado un amplio debate. ¿Es la solución o parte del problema? Muchos expertos advierten que aumentar los impuestos en un momento de desaceleración económica puede ser contraproducente, asfixiando aún más a empresas y ciudadanos.

Lo más preocupante es que el gobierno parece empeñado en repetir los mismos errores. El proyecto de presupuesto para 2025, ya rechazado, se basaba en cálculos igualmente optimistas, suponiendo una recaudación adicional de 12 billones de pesos a través de una nueva reforma tributaria.

La pregunta que surge es: ¿cuál es la salida? La respuesta no es sencilla. Pero lo que sí es claro es que se necesitan medidas urgentes y efectivas. Simplificar el sistema tributario, combatir la evasión fiscal, promover la inversión y optimizar el gasto público son algunas de las acciones que podrían ayudar a revertir esta situación.

En definitiva, la caída del recaudo tributario es un síntoma de un problema más profundo: la necesidad de un cambio de rumbo en las políticas económicas del país. Es momento de tomar decisiones difíciles y buscar soluciones innovadoras que permitan superar esta crisis y construir un futuro más próspero para todos los colombianos.