16 de mayo de 2025

Joe Biden: de la Casa Blanca a la construcción de una fortuna personal

10 de julio de 2024
10 de julio de 2024
Crédito: Joe Biden

New York, 10 de julio de 2024. Joe Biden, tras su primer mandato como vicepresidente, experimentó un notable crecimiento en su patrimonio. Ahora, se pregunta si podría replicar ese éxito financiero en 2025 tras concluir su mandato presidencial.

La economía estadounidense ha mostrado signos de recuperación, con el mercado de valores aumentando un 15% en los últimos seis meses y un 24% en el último año. No obstante, muchos ciudadanos no perciben esta prosperidad debido a diversos factores como el estancamiento del valor de las viviendas, salarios estancados, altas tasas de interés e inflación persistente. Biden, acusado por algunos de estos problemas económicos, también enfrenta sus consecuencias, con un patrimonio neto que se mantiene en aproximadamente 10 millones de dólares.

La mayor parte de la fortuna de Biden está en bienes raíces. Posee dos casas en Delaware: una en Wilmington y una residencia de verano en Rehoboth Beach. Esta última aumentó su valor durante la pandemia, llegando a 4,5 millones de dólares, pero las recientes tasas de interés elevadas han frenado el crecimiento de los precios inmobiliarios. Su salario presidencial de 400.000 dólares anuales, constante desde George W. Bush, ha perdido poder adquisitivo debido a la inflación, forzando a Biden a obtener una línea de crédito de 250.000 dólares en 2022, de la cual utilizó más de 100.000 dólares.

A pesar de estos retos, Biden mantiene una sólida posición financiera, especialmente considerando sus humildes comienzos. Nacido en una familia de clase media, vivió en una casa modesta y trabajó desde joven para ayudar a su familia. Su padre, tras encontrar éxito vendiendo autos, permitió a Biden matricularse en la Universidad de Delaware y luego en la facultad de derecho de la Universidad de Syracuse. Al regresar a Delaware, Biden comenzó su carrera como abogado y luego como defensor público, antes de entrar en la política.

El interés de Biden por los bienes raíces comenzó temprano en su vida adulta. Desde 1969, invirtió en varias propiedades, financiando sus compras con préstamos y el apoyo de su suegro. A lo largo de los años, compró, vendió y refinanció múltiples casas, utilizando las propiedades como una fuente constante de liquidez. Este patrón continuó incluso durante su tiempo en el Senado y como vicepresidente, donde alquiló parte de sus propiedades al Servicio Secreto.

Después de dejar la vicepresidencia, Biden se adentró en el sector privado, ganando 11,1 millones de dólares en 2017 a través de ventas de libros y conferencias. Con estos ingresos, compró una casa de verano en Rehoboth Beach por 2,7 millones de dólares y continuó financiando sus inversiones inmobiliarias con préstamos.

El futuro financiero de Biden aún está por determinarse, pero si sigue la tendencia de otros expresidentes, podría aumentar significativamente su fortuna tras su mandato. Ya sea permaneciendo en la Casa Blanca o encontrando nuevas oportunidades, Biden tiene el potencial de seguir expandiendo su patrimonio.