La cocaína, el nuevo oro blanco de Colombia: el estupefaciente podría dejar atrás al petróleo como la principal fuente de divisas
Según Bloomberg Economics, la cocaína podría convertirse este año en el principal producto de exportación de Colombia, superando al petróleo, cuyas ventas al exterior se han desplomado.
Bogotá, 15 de septiembre de 2023. La producción del estupefaciente sigue creciendo mientras el Gobierno adopta una política más indulgente con respecto a las drogas. Según estimaciones de Bloomberg Economics, la cocaína podría convertirse este mismo año en el principal producto de exportación de Colombia, superando al petróleo, cuyas ventas al exterior se han desplomado un 30% en el primer semestre.
“Estimamos que los ingresos por exportaciones de cocaína aumentaron a US$18.200 millones en 2022, no muy lejos de las exportaciones de petróleo por US$19.100 millones del año pasado”, dijo Felipe Hernández, economista de Bloomberg, en una nota1. “El Gobierno está destruyendo laboratorios donde las hojas de coca se transforman en cocaína, pero eso no ha impedido que la producción crezca”.
Colombia alcanzó el año pasado un récord de producción de cocaína, con 1.738 toneladas, y la superficie cultivada con coca aumentó un 13% hasta las 230.000 hectáreas en 2022, según un informe de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito. El aumento de la producción de cocaína ha tenido un impacto positivo de corto plazo en la actividad económica, la demanda interna y las cuentas externas del país, mientras que no parece afectar al tipo de cambio del peso colombiano, según Hernández.
El mandatario colombiano, Gustavo Petro, el primero de izquierda en la historia del país, ha modificado la estrategia del país frente al narcotráfico, buscando atacar a los jefes de la droga que se lucran más de la comercialización de estupefaciente en el exterior en vez de a los cultivadores de coca, que son el eslabón más débil de la cadena de producción. Petro pretende negociar con los principales grupos narcotraficantes del país, con el objetivo de acabar con seis décadas de conflicto civil mediante acuerdos de paz.
Sin embargo, el nuevo enfoque político hacia las drogas está facilitando que los grupos ilegales aumenten la producción de cocaína, dijo Hernández. Además, el brote inflacionario que afecta a la economía global podría complicar la gestión de los fondos europeos destinados a apoyar la transición ecológica y social del país.
La cifra de exportación podría estar subestimada, ya que no se tiene en cuenta el consumo interno ni las incautaciones en los países de tránsito y destino. Además, el precio de exportación se basa en una metodología que ajusta los precios promedio mayoristas en 2015-2018 y el precio de exportación CIF (costo, seguro y flete) calculado por Andrés Arias. El aumento de la producción de cocaína no solo representa un desafío para la seguridad y la estabilidad del país, sino también para la sostenibilidad ambiental y social.
