Bostezo dominical
Levantada temprano, tinto, lecturas y desayuno con huevo de dos yemas. Y los que “construyen país” votando. Lo hice por Sergio pero la casquivana urna le sonrió al santandereano Hernández.
Todo pasó sin que pasara nada. Bueno, pasó que Hernández dejó a Fico y a Fajardo en la cochina carretera.Petro le dio la cordialísima bienvenida a Rodolfo, como le decimos los igualados, advirtiéndole que podría terminar en la guandoca por corrupto.
La cruzada contra los corruptos es la joya de la corona de Hernández. La idea de Petro, su ideólogo Roy Barreras, Benedetti, Prada, Piedad Córdoba y otras joyas del sanedrín petrista, es apoderarse de esa bandera. Allí están los voticos faltantes.
Habíamos mercado “largo” por si las que vuelan. Pero los activistas de la primera línea se portaron como monjas de clausura.
Fico admitió el revés con estoicismo. Votará por el santandereano.
Fajardo estaba muy zen, recuperó la sonrisa, se quitó un piano de encima. No se irá a ver ballenas: se larga para Boyacá a montar en bicicleta con su rolísima Holguín, ala.
Me pasé el día escurriéndole el bulto a los resultados por cuentagotas, pero los boletines de la Registraduría – que se lució en toda la línea- se metían por debajo de la puerta. A las 5:15 de la tarde, cuando la noche empezaba a ponerse tierna como nalga de bebé, la suerte estaba echada.
El macho alfa santandereano, admirador del “filósofo Adolfo Hitler” (luego aclaró que se refería a Einstein), celebró la clasificación desde la cocina de su finca, con camisa amarillo pollito de la buena suerte.
Pasé la tarde-noche de resultados viendo a Chaplin y devorando “Leer para vivir”, memorias del librero Felipe Ossa. En el nervioso bostezo dominical se oía un rumor cercano de datos.
Consolidados los resultados, me “santandereanicé”. Para sentirme cerca del poder, empecé a felicitar amigos pingos como el nonagenario Cacua Prada y Eduardo Durán, ambos historiadores.
Supongo que Cacua escribirá una biografía de 3.789 páginas en letra de edicto sobre Rodolfo. Antípodas de su paisano, Cacua y Durán serían incapaces de “hpmadrear”, o darle en la jeta a nadie como lo ha hecho el próspero ingeniero.
Le envié mensaje a París a la periodista Nohra Parra: Nohrita, felicidades y felicitaciones. Ganamos, perdón, ganaron tus santadereanos con Rodolfo; además, tienen nuevo cardenal. Moñona. Creo que te tocó creer en Dios, ateísima. Este posible votico en blanco, te caerá en París, con o sin aguacero, pero con hormigas culonas…