7 de julio de 2025

La policía es civil. ¿Debe ser local?

25 de septiembre de 2020
Por Augusto Trujillo Muñoz
Por Augusto Trujillo Muñoz
25 de septiembre de 2020

Como se ha repetido en estos días, la Policía tiene una naturaleza civil. Su actividad corresponde al ejercicio reglado de la fuerza, está subordinada al jefe de policía y tiene por finalidad restablecer la tranquilidad, preservar la integridad física de la población y garantizar la conservación del orden público interno. Hasta donde he logrado indagar, las Fuerzas de Policía de Colombia son las únicas, en el mundo, que dependen del ministerio de Defensa.

Los colombianos hemos visto múltiples jefes militares con brillante carrera y plena consciencia de sujeción al Estado de Derecho. Curiosamente nos aparecen también algunos civiles, como el actual ministro de defensa, que parecen sentirse generales de cinco y más soles, con no disimulada tendencia a abusar y con talante autoritario. Suelen terminar pareciéndose bastante más a quienes causan los incendios que a quienes los extinguen.

En el artículo 315, numeral 2, de la Constitución Política del 91 se lee: “El alcalde es la primera autoridad de policía del municipio. La Policía Nacional cumplirá con prontitud y diligencia las órdenes que le imparta el alcalde por conducto del respectivo comandante”. La redacción inicial aprobada por el Constituyente, en primer debate de plenaria, era más precisa, pues incluía el siguiente aparte: “Las órdenes que el alcalde dé a la Policía…serán de carácter obligatorio…”.

Esta frase fue suprimida en el texto final, pero da cuenta de que el Constituyente no solo tuvo clara la condición civil de la Policía, sino que debatió la iniciativa de asumirla como un cuerpo de carácter local, como fue en el pasado, teniendo en cuenta, quizás, que estaba definiendo un modelo en el cual el municipio es la entidad fundamental del Estado. Por otra parte, en el capítulo sobre la Fuerza Pública, el inciso del artículo 223, se refiere a los miembros de los organismos nacionales de seguridad y a “otros cuerpos oficiales armados de carácter permanente, creados o autorizados por la ley”.

Este artículo plantea, en forma diáfana, la posibilidad de crear, por vía legal, cuerpos municipales de policía que puedan coexistir con la Policía Nacional, como sucede en otros países del mundo. La creación de la Policía Local no solo resulta viable en el derecho colombiano. Eventualmente, podría ser una respuesta útil frente a esta problemática que está afectando a la Policía Nacional y al país, en materia de orden público. Colombia, por desgracia, se está volviendo uno de los países emblemáticos de una tendencia creciente en América: La militarización cada vez mayor de la seguridad ciudadana. Semejante propensión es peligrosa.

En su condición de cuerpo civil, la policía no puede ser utilizada para estimular ese proceso, porque desvirtúa su esencia. En la de cuerpo local estaría integrada por vecinos, que serían los primeros interesados en procurar la convivencia de su comunidad. En el pasado la policía colombiana tuvo carácter territorial y funcionó relativamente bien. Con el advenimiento de la Violencia del medio siglo xx se pervirtió, como casi todas las instituciones del país durante aquel ingrato período.

Fue nacionalizada por razones que han sido objeto de controversia y porque, en un momento dado, el eje del pensamiento político se identificó con el fortalecimiento de la rama ejecutiva nacional del poder público. Esa fue una de las ideas fuerzas de la reforma constitucional de 1968 que, probablemente, no tendría el mismo sentido hoy, pero que entonces correspondía al dictado de los tiempos.

Aquel era otro país. La Violencia del medio siglo fue tan absurda como todas las violencias, pero las invitaciones al odio no eran tan irracionales como ahora. Sin embargo, entonces como hoy, la gran necesidad de los colombianos es similar: Evitar que esta inédita crisis desate una tempestad que arrase instituciones. Las crisis más agudas exigen respuestas originales, es decir, heterodoxas. En la presente circunstancia, la Policía Local puede ser una de ellas.

*Presidente de la Academia Colombiana de Jurisprudencia. @inefable1