29 de marzo de 2024

Iremos hasta las últimas acciones legales para hacer respetar las firmas de más de 80.000 corazones

5 de septiembre de 2019
Por John Alfredo González Gallo
Por John Alfredo González Gallo
5 de septiembre de 2019

Manizales, Septiembre del 2019

Queridos Manizaleños

Hoy, en esta madrugada, quiero escribir unas palabras que salen desde lo más hondo de mi corazón, palabras sinceras y llenas de agradecimiento.

Hace 11 meses empezamos este camino con emoción y dedicación, motivados y seguros de que estábamos haciendo lo correcto por un cambio de raíz en la política de nuestra ciudad. Tomamos la decisión de no resignarnos y de actuar. Decidimos recuperar el principal objetivo de la política en la vida: servir. Decidimos poner de nuevo el bien común sobre el bien personal. Decidimos iniciar nuestro proyecto político sin compromisos ni apoyos de maquinarias o partidos políticos tradicionales. Y hasta lo último fuimos coherentes con esta decisión.

Créanme que nunca pasó por nuestra cabeza unirnos con nadie para obtener algún beneficio. Esos beneficios que buscan muchas personas por un puesto en una administración de turno o un contrato para sus familiares como contratistas en un ente descentralizado. Esos beneficios que buscan tantos conocidos, y hasta amigos, metiéndole
la culpa a los estratos más bajos, sin darse cuenta que el 68%, que somos las personas de estrato medio en la ciudad, estamos vendiendo nuestro voto y nuestra honorabilidad por un simple beneficio personal.

Ahí está el verdadero problema de nuestra sociedad, personas que juzgan y se sienten con menos culpabilidad porque no reciben 50 mil, una lechona o un tamal, sino un puesto o un contratico que asegure sus ingresos por algún tiempo mientras pasa el gobierno de turno y se inician las nuevas elecciones para vender su dignidad. O peor aún, líderes políticos de una nueva generación, estudiados pero no preparados, que ya tienen repartidos los puestos
por burocracia y no por meritocracia, sin haber llegado y trayendo consigo las viejas mañas de la vieja data politiquera de la ciudad. Y es bueno que se sepa que esto no es liderazgo sino ansías y ganas de poder. Porque como ayer lo escuchaba en una bonita presentación: “el liderazgo no es un tema de títulos o cargo, sino de la actitud y el respeto que despiertes en los demás”.

Se aprende mucho en este proceso, aprendí de nuestra hermosa ciudad y de lo afortunados que somos, de cómo, con un buen manejo de nuestros recursos y de nuestro patrimonio, podríamos crear tanta infraestructura social que podría generar transformación integral en tantas personas y dinamismo en nuestra economía.

Corroboramos que sí se puede gerenciar una ciudad y que los políticos nos engañan haciéndonos creer que lo ciudadanos y empresarios no tenemos el talento y las cualidades para hacerlo. Si ellos lo hacen pensando solo en su beneficio y son capaces, ¿por qué no lo podemos hacer tú o yo? Tu o yo que pensamos en trabajo en equipo, que pensamos con el corazón cada decisión, que sabemos generar recursos, que sabemos manejar personal, que sabemos administrar, gerenciar y sobre todo, que sabemos el significado de la palabra RESPETO.

Este es el momento, no nos podemos resignar a que todo siga así, no podemos permitir que el tiempo siga pasando y nosotros sigamos esperando que el cambio llegue, pero sin hacer ningún esfuerzo por obtenerlo. Yo me siento feliz, honrado y orgulloso de haber liderado un ejército de soñadores. Un ejército de guerreros pacíficos y artesanos de paz
que CREEN que cada día es un milagro y que CREEN en la bondad. Que hacen valer hasta lo último el respaldo de la gente honesta y que CREEN en que lo más simple de la vida es lo más grandioso. Personas extraordinarias que valoran lo mejor de los demás y que siempre quieren aportar para que todos vivamos en un mundo mejor. Por eso seguiremos trabajando como veeduría ciudadana para un voto informado, nos convertiremos en un centro de pensamiento y una escuela de líderes con valores para la ciudad.

Como siempre lo he dicho: «El respeto se gana, la honestidad se aprecia, la confianza se adquiere y la lealtad se devuelve».

El respeto lo hemos ganado. Con honestidad, porque hemos sido coherentes y hasta lo último seguimos con nuestra independencia política, a pesar de que esto nos costó nuestra candidatura para estas elecciones. Porque las pruebas lo demuestran y nuestro aval bien merecido y trabajado, no fue recompensado por graves «inconsistencias en el sistema» y ojalá no por serios intereses o por manos oscuras para no dejar avanzar el único colectivo INDEPENDIENTE de verdad en la ciudad.

Queríamos competir en Franca Lid, pero bueno, este tema ya lo afrontamos nosotros como siempre lo hemos hecho, con gallardía, e iremos hasta las últimas acciones legales para hacer respetar las firmas de más de 80.000 corazones manizaleños que tenían la esperanza y nos dieron su confianza.

Seguimos trabajando con nuestra mayor arma que es nuestra sonrisa, y si esta impotencia y dolor es el precio que pagamos por querer cambiar el mundo, pues ha valido y valdrá la pena. Seguiremos en esta batalla por la esperanza, en esta lucha por humanizar y que vuelva la cultura ciudadana. Porque CREER que todo tiene solución no es optimismo, sino Talento. ¡Vamoossss!

«Bendice a todos los que hoy me pondrán obstáculos y no querrán que yo sonría, bendícelos con mucho amor para que puedan llenar sus vacíos y no le hagan daño a nadie.

Bendícelos para que no tengan que envidiar a nadie».

¡Te quiero mucho Manizales!

John Alfredo González Gallo
Colectivo Independiente CREO