28 de marzo de 2024

‘El tiempo no perdona’

17 de julio de 2019
Por Mario Arias Gómez
Por Mario Arias Gómez
17 de julio de 2019

Parodio una estrofa de la elegía del poeta castellano, Jorge Manrique, dedicda a la muerte de su padre: ¿Qué se fizo el rey don Iván Duque? / Y los flamantes inexpertos comisionados de papel, ¿qué se fizieron?

Hablo de la Comisión de ‘Excelencia Militar’, presidida por, Alfonso Gómez Méndez, alfil de López Michelsen, Ernesto Samper, Piedad Córdoba (Teodora Bolívar); Vicepresidente de la ‘Social Democracia Internacional’; sepulturero del proceso 8000; exparlamentario cercano a las ‘FARC’, aliado político de “El canoso” (Rafael Celis), del sobrino, Raúl Rojas -‘Pate-Palo’-, resucitado por el presidente Duque.

Manzanillo de ‘pata al suelo’, clon del sabihondo, Jaime Castro, el hijo de la modista, Vitermina, mamá y papá a la vez, becario eterno, voceador de mantecadas y panelitas de leche; detractor del proceso de paz, peregrino de todas las toldas políticas, redimido antiuribista, igualmente vivificado por el Gobierno, con quien hizo ¡moñona! al nombrarlo representante ante la OCDE, y designar al vástago ­-pan y pedazo- director de la Unidad de Restitución de Tierras.

Contemporizador ‘de mal agüero’, que cuando fungió como adversario de la reelección ‘Operación de salvamento electoral’ (El Tiempo 14-05-05) aseveró: “Los uribistas no están estructurando un proyecto político de largo alcance, ni organizando un partido, sino montando (una) operación que busca salvar electoralmente a senadores y representantes cercanos”.

Recordó: “Rojas Pinilla, desde el poder, intentó organizar la ‘tercera fuerza’ o ‘binomio pueblo-fuerzas armadas’, que prácticamente nació muerta, …los partidos no se crean ni organizan por decreto”. Estas “las severas reacciones que suscitó tamaño engendro”. “A pesar de que el Gobierno era conservador, Alzate Avendaño lo cuestionó, argumentando que: ‘no pueden montarse en el mismo bus gentes que van en direcciones opuestas’ Usan el nombre del General para parapetarse en su prestigio, sintiéndose miembros de una especie de ‘políticos de bolsillo’ que define los rumbos de la política oficial”. Cualquier parecido…

Partido ‘hechizo’ que vivirá del oxígeno oficial, y no irá más allá de las elecciones de 2006, uno de los varios costos políticos e institucionales de la prohibida reelección, sólo autorizada en 1825 ‘por respetos al Libertador’.

Cómo olvidamos las lecciones de la historia, empezamos a pagar sus altos costos, antes de que oficialmente tengamos Presidente-candidato”.

Mauricio González, expastranista, Secretario jurídico – presidencia Uribe, por él postulado como magistrado de la CC, comisionado para afianzar el famoso ‘articulito’ que, como Presidente, le obligó oficiar, lloroso, su entierro de tercera.

El último, Hernando Yepes -otrora aspirante a la embajada argentina-, comisionado cuota de Martha Lucía (Vicepresidenta), apasionado, tajante, radical antiuribista que transcribo: “Creo que Uribe es el punto más bajo de la trayectoria moral de este país”. ”dejó todas las lacras y los males propios de un autoritarismo tropical. ‘Personaje del Siglo XIX, absolutamente funesto, inapropiado para una sociedad moderna.  Un desastre en lo moral, …los niveles de desinstitucionalización a los que nos llevó, significan un gran retroceso. Administrativamente fue un completo fracaso”. “…su guerra, nos hizo perder de vista la perspectiva de la paz”.

No creo que haya un periodo de la historia de Colombia -desde la independencia hasta hoy- que tenga más signos negativos. El concepto de moralidad pública, de espíritu público, de sentido de lo nacional, descendió tanto, como no creo que hubiera ocurrido siquiera, desde los mismos albores de la república”. “Su administración fue un inagotable semillero de futuros prófugos. Cuando se los ve desfilar por la cárcel, por distintos delitos, se encuentra la imagen más plástica de lo que es el desastre moral, ético y político de un gobierno. El hecho de que se sustraigan de la justicia para escapar a su juzgamiento, es una conducta absolutamente inaceptable”.

Quien así pontificaba, se hacía lenguas -con la boca llena, en defensa de la jugosa cuota en la Procuraduría, Contraloría-. Leámoslo: “Gestión brillante, irreprochable, bajo la dirección del epónimo Alejandro Ordóñez y la intachable Sandra Morelli

De su ‘glorioso e indivisible Partido Conservador’, expresaba: “El fenómeno Uribe empujó al partido hasta el punto de postración más profundo en toda su historia, porque al sumársele a Uribe, y al reducir sus líneas programáticas, a una apreciación muy sumaria y grosera de lo que es su vocación al orden, optó por una visión carcelaria y penitenciaria del mismo, y no por aquella creativa que nos hizo grandes en la historia nacional, como autores de la Constitución/86. Uribe, realmente arrasó, arrastró la identidad doctrinaria del partido”.

“No me diga más”, diría Berceo.

Momios que, vencido el plazo, no se conocen sus ‘sabias’ admoniciones.

Bogotá, D. C.,17 de julio/2019