28 de marzo de 2024

Nairo Quintana: «El objetivo es ganar el Tour y Froome es el gran rival»

26 de junio de 2018
26 de junio de 2018
Crédito: Movistar Press Web.

Madrid, 26 junio del 2018 (EFE).- El colombiano Nairo Quintana (Movistar) afrontará el objetivo de asaltar el maillot amarillo del Tour de Francia «motivado y más fresco que otros años» y con la idea clara de que el británico Chris Froome y el equipo Sky serán los rivales a batir.

«El objetivo es ganar el Tour. Es la carrera que nos falta, con la que siempre hemos soñado. Tenemos un gran equipo. Esperamos salvar los primeros días y trabajar juntos como siempre hemos hecho y poder derrotar a los rivales».

Para lograr su sueño amarillo Quintana deberá medirse a rivales de gran potencia. Entre todos, destaca al británico Chris Froome.

«Froome y el Sky son los rivales número uno, está claro. Luego hay otros que pueden tener bastantes opciones, sobre todo dependiendo de lo que pase en el pavé. A Nibali ya le hemos visto ganar un Tour sacando provecho de sus condiciones en ese tipo de etapas», señaló Quintana, sin olvidarse de otros candidatos como Porte, Bardet o Roglic.

Respecto al camino hacia el gran objetivo, Quintana ha completado «una preparación un poco diferente». Aunque los resultados los valora como positivos, con segundos puestos en Colombia y Volta a Cataluña, quinto en el País Vasco y tercero en Suiza con victoria de etapa, el boyacense admite un trayecto más relajado, a veces en funciones de ayuda a compañeros de equipo.

Después de la Vuelta al País Vasco se marchó a Colombia para entrenarse en altitud, donde simuló algunas etapas del Tour, preparando el asalto a los puertos y sin olvidar la preparación de la contrarreloj.

«El objetivo principal es llegar más fresco este año al Tour y lo hemos conseguido, estoy más relajados y llevo muy motivado».

Sobre su equipo, el colombiano no tiene dudas de que tendrá a su servicio «el mejor conjunto que he llevado nunca a una carrera grande».

«Tenemos un equipo con corredores de todos los perfiles. Tenemos que estar unidos y trabajar juntos y así seremos el equipo perfecto. Por lo demás, Mikel Landa, Valverde y yo ya hemos estado en diferentes carreras compartiendo el liderato. Nos ha ido bien, hemos tenido buen feeling y no hay ningún problema. A medida que la carrera vaya avanzando, seguramente se aclarará el panorama».

Para Quintana será importante la situación de la carrera después de la etapa del pavés»

«Sería fenomenal. Nosotros somos tres y tenemos que sacarle el máximo provecho a esa ventaja que tenemos».

En el análisis del equipo, Quintana se refirió a cada uno de sus componentes.

«Imanol Erviti sabe estar muy atento en días clave y es muy polivalente. Es muy valioso, sobre todo en el llano. Bennati es un muy buen conocedor de la carrera y con mucha experiencia en ese tipo de etapas complicadas como las de los abanicos o la del pavé, José Joaquín Rojas también sabe moverse genial en ese tipo de etapas, y con su puntito más explosivo.Luego tenemos hombres de fuerza, como Andrey Amador y Marc Soler, que ruedan bien en el llano y en subida. De Valverde valoro su gran experiencia y Mikel Landa viene con ganas de comerse la carretera y seguramente le irán las cosas muy bien igualmente en este Tour».

Hablando del recorrido del Tour 2018, Quintana advirtió de la dificultad de la primera semana y de las opciones de los escaladores en las dos restantes.

«La primera semana me da mucho respeto y va a influir la suerte. Te puede pasar algo y le puede pasar a todos. Ya vimos a Froome en 2014, cómo por una caída se tuvo que ir para casa, y Contador unos días después tuvo la misma desgracia. Sabemos que este año puede pasar eso o simplemente que pierdas mucho tiempo y te tengas que recomponer para lo que queda de Tour».

Según Quintana, «la segunda mitad del Tour les puede ir bien a los escaladores que hayan salvado la primera y tenga buenas piernas, la montaña es pura y dura. La estrategia será importante porque habrá gente que haya perdido tiempo que serán más valientes. Para un equipo defensor quizá sea más complicado al tener un corredor menos que otros años».

«He podido ver casi todas las etapas importantes, todas las de Alpes y Pirineos y la contrarreloj del penúltimo día. En general es un Tour complicado y duro donde lo importante será tener suerte en la primera mitad y buenas piernas y fuerza en la segunda».

Quintana, dos veces segundo (2013 y 2015) y tercero en 2016, sigue soñando con ganar «la carrera más importante del mundo» y recuerda aquel 2013 de su debut, con el Mont Ventoux como testigo de uno «de los días más difíciles», además del podio de París.

Su victoria de aquel año en Semnoz quedó para siempre en su mente. «Ese día lloraba como un niño. Recuerdo ir temblando hacia la rueda de prensa. No sabía qué decir, qué hacer, estaba sobrepasado por la emoción. Sabía que ese día me había cambiado la vida».

Luego en los Campos Elíseos recuerda la confusión creada por un exceso de emoción.

«Disfruté bastante, pero no estaba preparado para tanta emoción y eso te provoca algo de confusión dentro de ti, pero aún así fue muy bonito».

(EFE)