29 de marzo de 2024

Bogotá no tiene autopistas 

12 de marzo de 2018
Por Jorge Enrique Giraldo Acevedo
Por Jorge Enrique Giraldo Acevedo
12 de marzo de 2018
Jorge Giraldo Acevedo
 
jorge enrique giraldoEl comentario editorial «pesadilla sin fin»,  en la edición del anterior viernes en el periódico «El Tiempo», nos sirve de base para asegurar que el problema de la movilidad  en las dos principales vías de ingreso y salida de la capital colombiana no  son problemas de ahora; esas dificultades son de muchos años y con el correr del tiempo se han agravado más.
 
Primero que todo debemos reconocerlo y afirmar que las pérdidas económicas y de tiempo por el problema de movilidad en el transporte general por las 2 vías principales de ingreso a la capital colombiana, llamadas flamantemente como «Autopista Sur» y «Autopista Norte» son incalculables y, a manera de ejemplo, podemos decir que un trabajador y también un conductor de un vehículo particular y de servicio público requiere diariamente de mucho más de 4 horas para llegar a su destino y regresar a su lugar de vivienda.
 
En cuanto al nombre de «Autopista» es pertinente recordar, según la enciclopedia libre Wikipedia que «una autopista es una vía terrestre demasiado rápida y segura y admite un volumen de tráfico considerable, con una serie de características que la diferencian de una carretera normal».
 
Aunque parezca muy difícil de entender las dos vías más importantes de la ciudad, al norte y sur de la ciudad capital colombiana, que sirven para el ingreso de miles de personas, reciben el fastuoso nombre de «Autopistas», pero en la práctica son ni más ni menos las peores vías de ingreso a Bogotá por sus permanentes trancones; lo más lamentable es que esta situación afecta a la mayoría de los habitantes y también a las personas que visitan la ciudad en calidad de turistas.
 
Este problema es casi permanente pero aumenta en las horas pico, en los puentes festivos y todos los fines de semana. 
 
También para el ingreso a la capital colombiana, para las personas provenientes de todas las ciudades y poblaciones del norte y sur del país se requiere,  en muchas oportunidades,  de más de 3 horas.
 
A la vista está que la capital colombiana carece de vías que merezcan el calificativo de «Autopistas» y los habitantes, al igual que sus visitantes, anhelan que la administración de Bogotá haga algo en forma inmediata para acabar este grave problema de pésima movilidad.
 
Tal y como lo afirmó recientemente en una de sus notas para la revista «Semana»,  en la sección  «Microlingotes»,  el periodista y abogado samario  Óscar Alarcón Núñez, «con estos trancones lo mejor es tener casa por cárcel».