¿TU TAMBIÉN, CLARITA?
La sedicente ministra de los trabajadores, Clara López, endureció la posición del gobierno nacional en torno a la reducción del 12 al 4 por ciento de los aportes de los pensionados a salud, contemplada en un proyecto de ley que arrancó su tercer debate en la Comisión 7ª del Senado.
En la hoja informativa que cotidianamente pone en la red el Ministerio del Trabajo se informa (el 06 de septiembre), que la ministra López dijo en la audiencia de socialización convocada por la comisión senatorial, que «se podría empezar bajando 4 puntos y priorizando pensionados de 1 salario mínimo, medida que cobijaría a 676.154 adultos mayores y evaluando disminuciones parciales del aporte de forma total que sea sostenible fiscalmente».
Pues, mírese que en el concepto rendido ante la Comisión 7ª de la Cámara, el 05 de octubre del 2015 por ese ministerio, entonces a cargo del exsindicalista Lucho Garzón, concepto suscrito por el viceministro de Empleo y Pensiones, Luis Ernesto Gómez Londoño, se proponía “evaluar distintos escenarios en donde se efectúe una disminución progresiva del aporte en salud de los pensionados de menores ingresos priorizando pensionados de un (1) smmlv, medida que cobijaría a 676.154 adultos mayores…”, de donde se sobreentiende que la reducción del 12 al 4 por ciento entraría de un solo golpe a beneficiar a estos pensionados de un smmlv.
La propuesta de la ministra López todo lo que hace es ponerle piso del 4% al concepto de hace ya casi dos años, postergando el alivio a los pensionados más pobres quién sabe por cuánto tiempo más, o nunca, porque del actual gobierno, presidido por un vanaglorioso tahúr, se puede esperar cualquier desagradable sorpresa.
En resumen, la ministra, dizque de los trabajadores, lo que hizo fue remar atrás, del lado opuesto del que están remando a brazo partido los 2 millones de pensionados del país hace ya varios años cuando emprendieron su épica reivindicación social que llegó a su punto culminante cuando el entonces candidato-presidente, en el afán de salvar su reelección en el 2014, perdida en primera vuelta, prometió solemnemente apoyar el proyecto de ley que ya cursaba en el Congreso, proponiendo la reducción del aporte a salud del 12 al 4 por ciento.
Se esperaba de la ministra López más, pues, en su condición de doctora en economía de Harvard, fácilmente le quedaba entender que si se bajan un poquito las gabelas tributarias que el Estado le otorga a los empresarios, estimadas en 38 billones de pesos anuales, según la misma Comisión de Expertos que propone la nueva reforma tributaria estructural próxima a llegar a consideración del Congreso, le queda espacio al fisco para reconocer la debida justicia, equidad y derecho a la igualdad que reclaman los pensionados.
El asunto de los pensionados, más que una cuestión económica, es una cuestión política en donde la voluntad del gobierno está del lado del 1%, ese grupo de privilegiados al que se le tiene pánico. Y si es un asunto político, política debiera ser también la estrategia de los senadores, apoyando el proyecto que ya tiene la aprobación de la Cámara de Representes y dejando en manos del gobierno la decisión política final de sancionarlo u objetarlo; y del lado de los pensionados, condicionando su voto al plebiscito a la suerte que corra el proyecto en estos días en la comisión senatorial. Así de sencillo.
Octavio Quintero
Editorial «El Satélite»
Editorial «El Satélite»