28 de marzo de 2024

Gobierno y Farc lanzarán este domingo en Briceño, Antioquia, plan piloto de sustitución de cultivos ilícitos

8 de julio de 2016
8 de julio de 2016

BOGOTÁ, 09 de julio de 2016. Este domingo 10 de julio, en Briceño (Antioquia), se lanzará el plan piloto de sustitución voluntaria de cultivos ilícitos, iniciativa que se enmarca dentro de los acuerdos logrados en la mesa de negociaciones de La Habana.

Durante el evento se creará la primera mesa de trabajo integrada por representantes del Gobierno Nacional, las Farc y la comunidad del municipio de Briceño, que busca que en el menor tiempo posible se suscriban los respectivos compromisos para el desarrollo del plan piloto.

En este sentido, el Gobierno se compromete con la ejecución de un plan de atención inmediata y la puesta en marcha del proceso de construcción conjunta, participativa y concertada del plan de sustitución y desarrollo alternativo.

A su vez, las Farc asumen la responsabilidad de erradicar voluntariamente aquellos cultivos en los que este grupo ha tenido algún tipo de incidencia.

Por último, las comunidades se comprometen con la sustitución de cultivos ilegales y la no resiembra de los mismos, así como a no estar involucradas en labores asociadas a los cultivos ilícitos ni a su comercialización.

La jornada del domingo en Briceño estará liderada por el alto consejero para el Posconflicto, los Derechos Humanos y la Seguridad, Rafael Pardo, representantes de las Farc, líderes campesinos de esta zona de Antioquia y miembros de la comunidad internacional, quienes servirán de garantes de los acuerdos que suscriban las partes.

Al respecto, el alto consejero Rafael Pardo explicó: “Históricamente las Farc no solo han sido un obstáculo para la erradicación de cultivos ilícitos sino que han sido grandes promotores de su propagación. A partir de este nuevo acuerdo, cambiarán su rol y se convertirán en promotores de la erradicación de la siembra de coca y de la siembra de nuevos alimentos que generen desarrollo en aquellas zonas rurales”.

De esta manera las partes dan un paso adelante hacia la reconciliación de los colombianos, en esta oportunidad a través de la sustitución de cultivos ilegales y siembra de cultivos lícitos, que sean una real oportunidad para los campesinos de regiones afectadas por la coca.