19 de marzo de 2025

THE MUSEUM OF POLITICAL CORRUPTION

7 de abril de 2016
Por César Montoya Ocampo
Por César Montoya Ocampo
7 de abril de 2016

cesar montoya

Albany en el Estado de Nueva York es  el epicentro de la putrefacción moral en los  EE.UU. Un profesor de música, entre  pícaro y burlón, propuso que, con esa fama vergonzosa y  para incentivar el turismo, se creara allí The Museum of Political Corruption. Algo parecido debiera hacerse en Argentina para estampillar con un inri los escabrosos disimulos inventados por los presidentes Kirchner para esconder  sus latrocinios contra el erario nacional.La certeza de una improbidad sin límites, ha sido  delatada por los medios de comunicación que, a  cada mañana, sorprenden con nuevas denuncias. En abril, Cristina Kirchner debe rendir indagatoria.

El precipicio de la inmoralidad tiene nombre : Lázaro Báez. Este sujeto, sin ser ingeniero, montó la empresa “Austral Construcciones” que, por secretas maromas criminales  con Néstor y Cristina Kirchner, fue favorecido con el 80% de las licitaciones estatales y copó  a su favor  el 11.6% del presupuesto de Vialidad Nacional. No solo eso. Con la presidenta Fernández, comparte terrenos y sociedades. No solo eso. Los kirchner son dueños  en el Departamento Santa Cruz de una red hotelera que  manejó el accionista Báez. Para lavar dinero mal habido llevaban un registro de ocupación del 100 x 100,  comprobando ahora los investigadores que éstos permanecían casi vacíos.No solo eso. El demoledor periodista Jorge  Lanata denunció cómo Báez introdujo de Uruguay a Argentina, clandestinamente, 3 millones de dólares.  Pero también Báez sacó 55 millones de euros vía Uruguay y  cómo la justicia le bloqueó 22 millones de dólares  depositados en bancos suizos. No solo eso. El noticiero Telenoche de  Buenos Aires  mostró,con evidencias fotográficas, a Martín, hijo  del privilegiado bacalao, contando, en un socavón,  15 millones de dólares. No solo eso. Cristina Kirchner comparte  con su  ricacho consentido  un condominio  de más de 80.000 metros.

Hasta la saciedad los argentinos están  convencidos  que los Kirchner fueron unos  mandatarios de fraudulencia sin  límites. Bufonescos en los despliegues, acaparadores dolosos de los dineros  públicos, arquitectos para edificar sobre la podredumbre, amigos de la caverna, socios de pirañas humanas.

Marcos Aguinis ha escrito un libro que devoran  los argentinos :  “!Pobre Patria mia!”.

Buenos Aires, abril, 2.016.

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