Agricultura limpia mejora calidad en cultivos de frutas
MANIZALES, 29 de marzo de 2016. Un grupo de 50 cultivadores de Caldas hace parte del “Modelo de plataforma de aprovechamiento integral, adición de valor y competitividad de frutales comerciales andinos”.
La iniciativa, que cuenta con recursos financieros del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), se centra en cinco frutas de la región cafetera: mora de castilla, guayaba pera, maracuyá, tomate de árbol y lulo.
Con el desarrollo de este proyecto, liderado por la Universidad Nacional Sede Manizales, se pretende mejorar la calidad global de la fruta -tanto la sensorial como la sanitaria- para abrir nuevos mercados de consumo e incrementar su exportación.
El proyecto, puesto en marcha en 2015, evidencia que el sector frutícola de Colombia aún carece de calidad en aspectos como control fitosanitario, inestabilidad de precios y deficiente infraestructura de apoyo, lo cual da lugar a una baja productividad.
Todo esto, detalla la investigación, lleva a que el pequeño productor ofrezca frutas de baja calidad y tenga una alta proporción de cosechas de segunda y tercera, lo que se convierte en un gran obstáculo para la buena comercialización de sus productos.
“Se quiere construir un modelo sostenible y sustentable de innovación de la cadena de frutas andinas y un empoderamiento del mismo por parte de los pequeños productores y transformadores”, explica Gemma Echeverría, investigadora del Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias (IRTA). La académica, que participa en la iniciativa, agregó que en Colombia más del 85 % de la producción proviene de pequeños agricultores.
El proyecto consta de cuatro fases, a través de las cuales se lleva a cabo la identificación de los cultivos de la zona geográfica, la preservación de la calidad de frutas en poscosecha, la transformación y promoción del consumo y, por último, la gestión del conocimiento y transferencia tecnológica.
En cuanto a la conservación de la fruta en poscosecha, se van a ensayar distintas condiciones de conservación, y se evaluará el efecto de la temperatura, en atmósfera controlada (modificando la concentración de oxígeno y dióxido de carbono).
“Todo el programa será masificado en el Eje Cafetero, a través de visitas que realizaremos para extender los conocimientos que sirven de apoyo, hasta ahora, al grupo de cultivadores y productores de Caldas. La idea es que, por medio de conferencias, otras poblaciones puedan aplicar las técnicas de una agricultura limpia y sostenible”, subraya Carlos Eduardo Orrego, director del proyecto y docente de la U.N.
Colombia es el tercer país de América Latina en número de hectáreas destinadas a la producción de frutas, con una participación de 10.5 %, y el quinto productor de la región con el 7.2 % del volumen de producción. El sector frutícola es de vital importancia para el agro colombiano, por aspectos como área sembrada, productividad, valor, generación de empleo y perspectivas de desarrollo.
Asimismo, la investigación cuenta con el apoyo de AKIS International y Frugy S.A., empresa local certificada recientemente por su proceso orgánico en el manejo de cultivos, áreas sembradas, productividad yprácticas de control de plagas.
Agencia de Noticias UN