28 de marzo de 2024

Farc dinamitan en dos tramos el oleoducto Caño Limón-Coveñas

18 de junio de 2015
18 de junio de 2015

Además  incendian 12 viviendas y contaminan el río Catatumbo

BOGOTA, 18 de Junio de 2015 (RAM) Dos atentados terroristas contra el oleoducto Caño Limón-Coveñas ejecutaron en las últimas horas elementos de las Farc en el departamento de Norte Santander, en uno de los cuales provocaron un incendio que afectó a por lo menos 12 viviendas campesinas. En ambos casos, el crudo derramado fue a caer al Río Catatumbo.

El primero de los ataques dinamiteros, que forman parte de la escalada terrorista desatada por las Farc contra la infraestructura eléctrica, petrolera y de carreteras en el territorio colombiano, se registró a la altura del kilómetro 419 de la línea de transporte de crudo, en la vereda Filoguano, en jurisdicción del municipio de Teorama. El segundo, fue en jurisdicción del municipio de Tibú, en la vereda conocida como Sector Seis.

En Teorama, el alcalde local, Eliud Camargo León reportó que la explosión del oleoducto provocó un incendio que alcanzó a 12 casas, las cuales quedaron semidestruidas, por fortuna sin causar lesionados.

Sin embargo añadió que aproximadamente 50 familias del corregimiento de El Aserrío se vieron obligadas a desplazarse hacia la cabecera municipal como consecuencia de los estragos causados por la explosión y el derrame del crudo, que cayó a varias fuentes de agua y al mismo río Catatumbo.

Mientras tanto, la empresa Ecopetrol anunció que inmediatamente se conocieron los ataques terroristas procedió a suspender el bombeo y activó el Plan de Contingencia, instalando las correspondientes barreras de protección en el sector de La Gabarra para contener la mancha sobre el río Catatumbo.

Así mismo, se notificó al Consejo Departamental y Municipal de Gestión del Riesgo y Desastres de Teorama y de Tibú y a las demás autoridades ambientales.

Personal de las Fuerzas Militares acantonadas en la zona se trasladaron a los sitios en los cuales se produjeron los atentados para asegurar el ingreso de los colaboradores de Ecopetrol y atender la emergencia, señaló la empresa petrolera.

Ecopetrol rechaza enfáticamente estas acciones ilícitas que ponen en riesgo la integridad de las personas, afectan gravemente el medio ambiente, impiden el bienestar de las comunidades y el normal desarrollo de las actividades petroleras, concluye el comunicado.

Como se sabe, el oleoducto Caño Limón-Coveñas transporta el petróleo que se produce en los yacimientos de Arauca hacia el Puerto de Coveñas, ubicado en la Costa Caribe, en jurisdicción del departamento de Sucre, donde se embarca para la exportación. La línea de transporte de crudo tiene una extensión de 780 kilómetros.

El río Catatumbo, al cual cayó ya la mancha de petróleo, nace en el departamento de Norte de Santander, en la parte oriental de Colombia, específicamente en el cerro de Jurisdicciones a 3.850 msnm, en el municipio de Ábrego, y desemboca, tras 450 kilómetros de recorrido, en Venezuela en el lago de Maracaibo, al que aporta cerca del 60% de su agua dulce.

En lo que va corrido del año se han registrado 20 atentados y acciones terroristas contra oleoductos, pozos, líneas de trasferencia y equipos para la producción, mantenimiento y el transporte de crudo, informó Ecopetrol.

Los atentados se han concentrado en el sur del país (Putumayo y Nariño), en los oleoductos Transandino, San Miguel-Orito y Churuyaco-Orito, así como en varios pozos de los campos de producción de esa zona del territorio nacional. También se han registrado dos atentados en Caño Limón-Coveñas y otros dos pozos e instalaciones y equipos del campo Tibú, Norte de Santander.

A los atentados contra la infraestructura de Ecopetrol se suman ataques y hostigamientos contra otras empresas productoras y transportadoras de hidrocarburos, como el ocurrido el lunes 8 de junio de 2015 en Puerto Asís, Putumayo, cuando integrantes de grupos al margen de la ley interceptaron 23 carrotanques y obligaron a derramar el crudo en la vía, lo que ocasionó la contaminación de fuentes de agua y una afectación directa a los campesinos de esa zona.

En lo corrido del 2015 se han derramado más de 14 mil barriles por cuenta de los atentados, lo que ha afectado a las comunidades de cuatro departamentos que sufren el impacto de los derrames sobre ríos y otras fuentes de agua, tierras y humedales.

En los ataques ocurridos en 2015 se han registrado derrames a los ríos Caunapí y El Rosario en Nariño, Cubugón en Arauca y Cuembí en Putumayo, que afectaron a más de 80 mil personas de forma directa que se surten de agua de estos ríos y sus afluentes u obtienen su sustento de actividades como la pesca.

Un estudio realizado por el Instituto Alexander von Humboldt para Ecopetrol determinó los siguientes riesgos y consecuencias de los atentados en la zona del Catatumbo:

Las voladuras inciden de manera directa y letal sobre más de 30 especies de peces.

25 especies de mamíferos cuentan con los recursos de esta cuenca para sobrevivir. Algunos de ellos en riesgo de desaparición, como la danta, el armadillo, el leopardo, el manatí, el ñeque o el venado colablanca.

15 especies de reptiles y 20 de anfibios sufren las consecuencias del crudo en sus ecosistemas cada vez que hay un derrame, como la rana marsupial, la rana de cristal y la babilla, así como tres especies de tortugas de río.