28 de marzo de 2024

Política con pimienta

15 de abril de 2015
15 de abril de 2015

david barguil

Segundo, el joven Presidente del Partido  se entrevista con el Presidente Santos, en Palacio, y dice que no son de la Unidad gobiernista, pero no pide que los conservadores que están en el gabinete santista y otros funcionarios, presenten su renuncia.  Y tercero, los conservadores uribistas están que bailan cuando conocieron la carta que le dirigieron a Juan Manuel Santos, tres delfines que hoy son ya bacalaos, prácticamente ordenándole a Barguil que se lanzara con su colectividad a la oposición cerrada al gobierno. La carta no tiene respuesta por el momento. O sea que Enrique Gómez, Marianito Ospina  e Ignacio Valencia, creemos nosotros, se van a quedar sin respuesta hasta después de las elecciones de octubre, puesto que el Directorio Nacional no va a ser tan ingenuo para abandonar la mermelada gobiernista y cambiarla por los peladeros de la oposición. Eso era en los tiempos de Laureano, Mariano y Guillermo León. Hoy los dirigentes conservadores son unos pollos peletas al  lado de ellos.

Que el conservatismo recupere su identidad

santos y uribe

Quienes somos observadores de la política colombiana, recordamos como si fuera hoy, la foto triunfalista de Santos asido de las manos de Gómez Hurtado, Valencia López y Ospina Hernández, cuando éstos ofrecieron entusiasmados su adhesión a la candidatura primera del actual Presidente. Creyeron que continuaba el gobierno reeleccionista de Alvaro Uribe en cuerpo ajeno. Y cuando vieron que Santos les salió respondón e independiente empezaron a bajársele del tren , hasta llegar hoy en día a producir semejante catilinaria que recuerda los más feroces días de los enfrentamientos  partidistas. Los octogenarios hijos de los ex presidentes colombianos , piden a gritos que el conservatismo recupere los principios de 1.849, de Caro y Ospina y su identidad, y no se limite a recoger los mendrugos ni la mermelada del gobierno actual, para lo cual ha inclinado su cabeza. Nada de participación en la pitanza.

Laberinto semántico

diccionario

El Maestro Osuna o Lorenzo Madrigal, en su columna de El Espectador, hace mofa del lenguaje empleado y sugiere que el joven David Barguil, yerno del expresidente César Augusto Gaviria, no conoce esa palabra cervantina, que no es más  que el alimento cotidiano. Pero de lo que no teníamos idea, es de la palabra faraute.  Escribieron los vetustos delfines, después de múltiples recomendaciones y reclamos al » regimen » santista: » No parecen ser tales los designios del mandatario  y sus farautes. Su visión del futuro es enteramente otra  y por ello los objetivos a  corto, mediano y largo plazo no coinciden con los sentimientos de esperanza que anunciaron al hacerse cargo del poder «. Acudimos al Diccionario de la Real Academia y nos encontramos que » faraute» es un mensajero de confianza o un rey de armas de segunda clase a las órdenes de los señores y los generales  o el actor que se encarga de leer las páginas introductorias a una obra de teatro. Dejamos al lector para que acomode a su libre entender lo que quisieron decir quienes suscriben la carta política a que nos referimos al emplear dicho término. Los uribistas lo toman como sinónimo de secuaz. Las cinco largas y pesadas hojas epistolares las leyeron muy pocos. Hicimos una pequeña encuesta entre nuestros contertulios del Parque de Bolívar de Manizales, y de 20 consultados, solo dos confesaron haberla leído.  ¿ Será que el Doctor David Barguil la digirió ?. Silencio al respecto.

Que sea en serio

Esperamos que el acta que firmaron el martes en Manizales el Ministro de la Presidencia, Néstor Humberto Martínez Neira y el director de la Aerocivil, Gustavo Alberto Lenis Steffens, no se constituya en una promesa más de campaña política. En época preelectoral el gobierno nacional acostumbra a hacer anuncios de esta naturaleza que, transcurridos los comicios, se convierten en palabras que se lleva el viento. Ojalá estos anuncios cristalicen en un tiempo prudencial y no terminen siendo una colombina para sacarnos de la desidia preelectoral y motivarnos a votar por los mismos con las mismas, parodiano a Gaitán.

Otra empresa aérea

aces

Mientras que solucionamos definitivamente nuestros problemas de incomunicación aérea, las fuerzas vivas de Caldas sí deberían hacer algo por vincular una nueva empresa aérea a Manizales. Estamos hasta la coronilla con los abusos que comete diariamente Avianca con los usuarios. Con el precedente de que el gobierno sanciona ejemplarmente a muchas empresas e industrias que cometen desafueros contra los consumidores, menos a este monopolio aéreo que todos los días atropella a su clientela. A comienzos de esta semana la Superintendencia de Indusstria sancionó con una multa confiscatoria de 33.800 millones a Florhuila por faltas menos graves que las que usualmente inflige Avianca a los pasajeros. ¿No hay en Colombia una empresa aérea que nos preste el servicio eficiente que tenía la desaparecida Aces (adquirida por Avianca para acabarla) no sólo en la región cafetera sino en el país?