Unidad para las Víctimas rechaza la violencia contra las mujeres
La implementación de la Ley de Víctimas ha permitido articular esfuerzos para acompañarlas y reconocer su importante rol en la sociedad.
“Las mujeres demuestran día a día ser constructoras de paz en el ámbito de lo público y lo privado. Sin duda, son y serán fundamentales para la construcción de paz en el país”, manifestó Paula Gaviria, directora general de la Unidad para las Víctimas.
“En cuanto a la atención del Estado, hoy es una prioridad la reparación integral a todas las mujeres víctimas de delitos contra la libertad e integridad sexual”, añadió la funcionaria con motivo del Día internacional de la eliminación de la violencia contra las mujeres.
Más allá del aspecto individual, ya son siete los procesos de reparación colectiva que se adelantan con mujeres que por pertenecer a organizaciones sociales fueron víctimas de ataques a sus derechos: Organización Femenina Popular (OFP), Red de Mujeres víctimas “Narrar para Vivir”, Liga de Mujeres Desplazadas, Asociación Nacional de Mujeres Campesinas, Negras e Indígenas de Colombia (Anmucic) a nivel nacional y de la región del Zulia en Norte de Santander, Afromupaz y Asomuproca, que involucran aproximadamente 6.000 mujeres víctimas.
La Unidad ha impulsado la aprobación de la Ley 1719, que adopta medidas para garantizar el acceso a la justicia de las víctimas de violencia sexual, en especial la violencia sexual con ocasión del conflicto armado, así como el decreto presidencial que declara el 25 de mayo como ‘Día Nacional por la Dignidad de las Mujeres víctimas de violencia sexual en el marco del conflicto armado interno’. Esta se trata de una iniciativa de la periodista Yineth Bedoya, quien solicitó la instauración de este día como una medida de satisfacción en su proceso de reparación integral.
Hoy, Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, cuando recordamos el legado de las hermanas Mirabal, activistas políticas de República Dominicana asesinadas en 1960 durante la dictadura de Rafael Trujillo (1930-1961), la Unidad para las Víctimas expresa su compromiso con la participación efectiva de las mujeres en contextos y escenarios de paz y posconflicto.
Para ello, en su labor de coordinadora del Sistema Nacional de Atención y Reparación Integral a las Víctimas, continuará fortaleciendo los procesos de reparación colectiva de mujeres, con el fin de empoderarlas en la garantía de sus derechos para la construcción de una sociedad en paz.