18 de abril de 2024

Señorita Sucre, la nueva soberana de la belleza en Colombia

18 de noviembre de 2014
18 de noviembre de 2014

 

reina nacional de la belleza

Ariadna, fue elegida hace casi dos años como reina de Sucre, pero en 2013 no pudo participar en Cartagena, pues había firmado un contrato como imagen de una firma de trajes de baño y tenía restricciones como lucir piezas de otra marca. Casualmente, el año pasado, también fue imagen de Cali Exposhow, y mientras se realizaba el evento de la Salud, la Moda y la Belleza, se cumplía el Minicromos.

Pospuso su participación y este año desembarcó en Cartagena con la firme convicción de reinar y lo logró, rodeada naturalmente, de un gran favoritismo entre el pueblo cartagenero y la prensa. “El favoritismo da más responsabilidad, es un doble compromiso: a quienes cree en ti hay que dejarlos bien en alto y a quienes no creen en ti, hay que dejarlos callados”, expresó la nueva soberana a El País.

Confesó además a que lo largo del concurso, recibió críticas por su actitud en pasarela, que para muchos era más de modelo que de reina. “Me las criticaron mucho y me negué a cambiar porque yo quiero darle ese toque moderno al reinado, que sea algo diferente”.

Asegura que como Señorita Colombia además de aportar a la misión social del Concurso, también quiere promover la labor que desde hace cuatro años realiza en Sucre con la fundación que lleva su nombre y en la que brinda atención médica, educación básica primaria y formación en música con la gaita y el pito atravesado, instrumentos típicos de la región, a niños de poblaciones vulnerables.

De este proyecto tuvo la oportunidad de hablar ante el jurado calificador y nada raro sería que este aspecto, sumado a su conjunto físico hayan inclinado la balanza a su favor. Eso, sin olvidar que la reina habla inglés y alemán.

Con plena convicción de la mujer que es, asegura que tiene “todas las cualidades de una mujer emprendedora y la mujer perfecta para llegar a Miss universo y conseguir la corona que ha sido tan esquiva y que nos hace falta”.

En su paso por Cartagena muchos llegaron a decir que era el doble de Sofía Vergara y creó, en torno suyo, algo que algunos periodistas denominaron como ‘El efecto Paula Andrea Betancourt’: todo el mundo la quería y desde el inicio ya la veían con la corona.

Asegura que el “título es para toda la gente que me ha apoyado, a todo el pueblo colombiano y a todos sucreños que han creído en mí en este año y medio casi dos años de reinado. Celebraré con mote de queso, yuca, suero, con todo lo típico de mi región”.

La paz, pregunta del millón

El momento más esperado de la noche, además del fallo final del jurado, son las respuestas a las preguntas hechas a las cinco finalistas, que no siempre suelen ser las más acertadas.

Pero esta vez no hubo pánico escénico, ni confusiones, ni malas respuestas. Las candidatas respondieron muy seguras a las preguntas que versaron sobre el proceso de paz.

Anoche, la regla tácita del Concurso Nacional de Belleza de que “las reinas no pueden hablar de religión, política y sexo” se rompió durante la elección de la Señorita Colombia 2014, cuando las cinco finalistas debieron responder preguntas relacionadas con el proceso de paz. Esa decisión se tomó al evaluar propuestas de temas que hizo el público a través de redes sociales.

El jurado de esta versión consideró que era más que justo que todas las candidatas se refirieran a un mismo tema, así no habría ventajas entre una y otra de las representantes. Algunas preguntas fueron sugeridas por los seguidores del concurso.

“No tratamos de sorprenderlas con el tema, lo que queremos es sentir que ellas, fuera de expresarse, tengan la mayor confianza para referirse al tema en otros contextos y una de ellas pueda ser una verdadera Miss Universo Colombiana”, dijo el jurado.

La primera candidata interrogada fue la Señorita Antioquia, Natalia Ochoa Calle, quien frente a la pregunta ¿Cómo le resumiría al mundo el proceso de paz? respondió: “Como un acuerdo y una buena relación entre lo que es el pueblo y el gobierno. Y para eso necesitamos ser muy comprensivos, respetuosos, valorar las diferencias que tenemos cada uno y sobre todo respetar”.

Una de las mejores respuestas de la noche, según el público del Auditorio Getsemaní, fue la de la Señorita Bogotá, Viviana Dávila Giraldo. A la pregunta ¿Qué es más importante, perdonar o hacer justicia?, esta caleña que representó a la Capital dijo

contundentemente: “Considero que el perdón es un acto donde el ego se deja a un lado y da un significado muy grande para la persona que logra perdonar. Y cuando uno perdona, está haciendo justicia”.

Por su parte, Ariadna Gutiérrez, Señorita Sucre, menos fluida en su respuesta, frente a la pregunta: ¿Si pudiera estar en los diálogos de La Habana, qué le aportaría a este proceso de paz?, dijo: “Le aportaría la sensatez que debemos tener todos los colombianos al tomar una decisión tan importante en un momento importante. Colombia quiere la paz, la necesitamos ya”.

Para Jessica Castañeda, de Cauca, la manera de promover la cultura de paz en las nuevas generaciones es “la educación. Todos tenemos la ilusión de la paz, debemos motivar a todos los jóvenes, incentivar el respeto y la tolerancia por todas las personas”.
Finalmente, Daniela Castañeda, de Meta, dijo que la acción que deben emprender los colombianos para contribuir a la paz es tener conciencia y perdonar de corazón. “Más que sufrir cada acontecimiento que se ha dado en nuestro país es comprender, aprender y perdonar”.

Virreina: Antioquia
Natalia Ochoa Calle: Nació en Medellín hace 22 años. Sus medidas son 86-63-100, mide 1.78 y actualmente cursa VII semestre de Arquitectura. Se describe como una mujer sencilla, alegre y sincera. Hasta último momento fue una fuerte opcionada para llevarse la corona.

Primera princesa: Cauca

Jessica Paola Castañeda Guevara: Nació en Popayán, tiene 22 años y sus medidas son 87-60-95. Actualmente cursa IX semestre de Ingeniería Industrial, como segunda lengua domina el inglés. Se describe como una mujer auténtica, comprometida y disciplinada. Sorprendió su calificación en la gala.

Segunda princesa: Bogotá

Viviana Dávila Giraldo: Nació en Cali hace 23 años, pero ha vivido los últimos tres en la capital del país. Sus medidas son 85-65-97, mide 1.81 y actualmente cursa X semestre de Comunicación Social y Periodismo. La audiencia esperaba un mejor resultado en su participación.

Tercera princesa: Meta
Daniela Castañeda: Nació en Villavicencio, tiene 21 años, sus medidas son 90-63-92, mide 1.76 y está en VII semestre de Comunicación Social para la Paz. Se describe como una mujer luchadora, apasionada y entregada, sensible ante las problemáticas sociales.