Reelección mandatarios regionales es improcedente
Lo más grave, es haberlo radicado en la cámara de representantes, un viernes a las 4pm, sin dar ninguna explicación a las bancadas de los partidos acreditadas en el congreso de la república, que están en la obligación de saber con antelación cuales son las propuestas del Ejecutivo para abordarlas en sus respectivas comisiones.
Fueron muy oportunas las manifestaciones en contra, del señor Presidente del Congreso y otros miembros, al haber censurado tal atrevimiento que va en contravía de las buenas prácticas para una legislación eficiente y de la administración pública en general. Siempre hemos sostenido a través de esta columna que de la pureza de las Leyes depende la eficiencia de los actos administrativos. Cuando las leyes nacen contaminadas por regla general producen actos administrativos deshonestos y envueltos en mermelada.
La voluntad del Constituyente Primario, – para el caso que nos ocupa que es el Pueblo-, debe ser respetada y acatada muy especialmente por las tres ramas del poder público, quienes en todo momento están en la obligación de hacerlas cumplir dentro del fuero constitucional que les corresponde.
Es de mal gusto que semejante entuerto hubiese sido presentado por iniciativa del presidente Santos, en complicidad con el señor Ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, al haber radicado el proyecto para la reelección de alcaldes y gobernadores, a espaldas del congreso y de las bancadas políticas acreditadas en el mismo, simplemente con el argumento de equiparar estos períodos con los del Presidente de la República.
Ha de saber el señor Presidente que ninguna autoridad es competente para modificar la voluntad popular expresada en las urnas, como es el cado de las elecciones de los mandatarios regionales. Lo expresado en ellas, por el constituyente primario, – que en esta caso repetimos, es el pueblo -, únicamente se podrá modificar por voluntad del mismo invocando uno de los mecanismos de participación ciudadana contemplados en el artículo 103 de la Carta Política, mas no, por el capricho de satisfacer promesas de campañas electorales, mal estructuradas y lanzadas muy a la ligera.
Considero que al Señor Procurador General de la Nación, le queda la tarea de iniciar cuanto antes una investigación con el fin de sancionar a los responsables de este desafuero, puesto que, de no hacerlo, en un futuro se pueden presentar peores circunstancias de violación a las normas constitucionales, por abuso de poder para satisfacer apetitos politiqueros
Para que el señor Presiente hubiese procedido con tal iniciativa, ha debido en primera instancia formarse un juicio, de cual, es la situación actual de los mandatarios regionales, si este trabajo se hace como realmente debe ser, llegamos a la conclusión que el País en materia de gestión regional con algunas excepciones, se raja, es mucha el agua que corre por debajo del puente sin que los gobernados nos demos cuenta.
La otra pregunta que debemos hacernos, es qué este pensando el señor Presidente respecto a la misma iniciativa con los legisladores regionales: Ediles, Concejales y Diputados, a lo mejor también les ofreció extenderles el mandato con tal de que afinaran sus aspiraciones reeleccionistas, que lamentablemente, esto no se va a dar, puesto, que, el proyecto prácticamente nació muerto, al ir en contravía de las normativas congresionales, a no ser que lo enderece a punta de mermelada, como ocurrió con su reelección.
Pero, lo más grotesco de todo, es que son varios los departamentos y municipios cuyos mandatarios se encuentran en el ojo del huracán, puesto que están siendo investigados por los Organismos de Control, por diferentes delitos cometidos contra la administración pública en el ejercicio de sus cargos. Muchos de ellos, ya se encuentran en las cárceles, otros huyendo de de la justicia y buena cantidad en la antesala para ser llamados a juicio.
Otra cosa distinta es que el Presidente Santos, hubiese presentado tal propuesta dentro del Proyecto de Acto Legislativo 018,- sobre equilibrio de poderes-, previo estudio de la situación jurídica de las autoridades departamentales y municipales, evaluando la situación de cada uno, para recomendar si es viable o no su reelección.
Son millones los ciudadanos que están clamando porque sus gobernadores, alcaldes, y poderes legislativos, terminen el mandato cuanto antes, puesto que no están cumpliendo con su programa de gobierno y legislativo, con el cual fueron elegidos.
Tenemos casos de varios gobernadores y alcaldes, que próximos a completar tres años de su gobierno, aún no han presentado ni a las asambleas, ni a los conejos municipales, los planes de desarrollo, que es prácticamente la carta de navegación para desarrollar satisfactoriamente sus labores.
Queda pues en manos del Congreso de la República, no dejarse tentar con prebendas y ofertas de mermelada para que este proyecto sea aprobado, el pueblo estará pendiente del giro que se vaya a dar, es donde nos vamos a dar cuenta si realmente el congreso que elegimos en las elecciones del mes de marzo/2014, es superior a los anteriores, que se caracterizaron por ser la peor vergüenza de nuestra Democracia.
Todo indica que el Presidente de la República, ante tanta oposición, le tocará retirar la propuesta, desde luego que quedará muy mal con las autoridades regionales, pero esta no es la razón, para que comprometa el futuro de nuestras regiones a la topa tolondra, sin ningún conocimiento de causa y sobre todo sin los estudios de rigor que para este caso se requieren.