Para el 4 de agosto, audiencia por pérdida de carros de tránsito
La decisión se adoptó ante la posible modificación de la calificación de los delitos, ya que el fiscal noveno seccional Didier Zamora, acusaría a algunos de los procesados, ya no por hurto calificado y agravado, sino por abuso de confianza.
Ante este cambio, los abogados defensores solicitaron el aplazamiento de la audiencia para analizar si sus defendidos se allanan o no a los cargos, teniendo en cuenta que de los 8 o 9 años que da la pena de hurto calificado, podrían pasar a pagar sólo dos o tres años, excarcelables. Así se beneficiarían Yéison Asdrúbal Frasser, José Alberto Ramírez y José Ricardo Cárdenas Murcia, este último, actualmente detenido.
El hecho se remonta al año 2011 cuando se extraviaron de un parqueadero de Manizales, denominado “Ruta 30”, 300 vehículos inmovilizados por la Secretaria de Tránsito de la ciudad, por infracciones de sus propietarios o conductores.
Según la fiscalía, para ese entonces la dueña del parqueadero era la señora Lucia Idárraga Idárraga, quien como representante legal celebró un contrato de compraventa de dicho establecimiento comercial con Cárdenas Murcia.
Posteriormente, Cárdenas Murcia decidió trasladar los vehículos a otro parqueadero, ubicado por la vía antigua vía a Chinchiná y progresivamente a través de empleados y conductores los envió a Medellín y Bogotá.
Se estableció más adelante que el esposo de la señora Idárraga, José Alberto Ramírez, como dueño de la empresa Grúas Palmeto, fue el que hizo el negocio con Cárdenas Murcia. Éste a su vez, vende las motocicletas retenidas en el parqueadero a Yéison Asdrúbal Fasser Bermúdez que decide también venderlas, según la investigación, sin ninguna documentación como facturas de compra o contratos de compraventa, y que fueron a parar a Fresno (Tolima).
De los 300 vehículos desaparecidos, las autoridades sólo han recuperado 140. La investigación se inició, por denuncia que formuló el entonces secretario de tránsito de Manizales, Diego Franco Molina.