21 de marzo de 2025

Qué mundial…

23 de junio de 2014

esteban jaramilloPorque la fiesta se siente y se vibra, en los estadios, en Brasil y en el mundo entero. La ambición  de ganar pasa de largo y aplasta el miedo a la derrota que tanto gobernó en el pasado, con equipos ramplones, físicos, que devoraban kilómetros o se nutrían de tácticas defensivas, para ganar puntos sin espectáculo.  En Brasil se ven los chicos hechos  grandes, castigando la arrogancia de equipos que hace rato perdieron la humildad y sus futbolistas las ganas de gloria, eliminados y retirados en sonora humillación a una semana de la competencia.

Qué mundial…

Torneo en el que todos ponen el hombro, con juego colectivo que no admite protagonismos individuales, de grupos trabajados en macizos bloques con tensión y coraje, sobrellevando el efecto devastador de la humedad que condiciona y debilita.

Con Colombia, competidor de lujo; escuadra rica en valores técnicos, recursos ofensivos y estímulos para los aficionados, tan desenfrenados, que llevan a sus hogares “el sudor” de sus ídolos.

Selección, la nuestra, con historias de amor infinito y tardes inolvidables, llenas de gritos de gol, con un pizarrón fuerte, que gana por demolición y gusta por su brillantez técnica.

Con jugadores en el trono de los mejores, respaldados por un equipo solidario, que no sabe de desfallecimientos, que ataca y defiende, que conecta sus líneas, que da giros decididos a su guion y encuentra  formulas rompe moldes, para modificar formas y estilos.

Con fútbol rápido, dinámico y agresivo  en contragolpes, juego posicional, en  movimiento constante y profundidad en la maniobra.

Equipo en el que todo encaja, por sus líneas conectadas, y el compromiso grupal que parece irrompible.

Qué mundial este. Con partidos memorables, con atletas en enorme esfuerzo, con alimento para el buen  gusto, con respeto a la pelota y al juego como espectáculo. Que  nunca termine esta fiesta.