El desarrollo económico, social y productivo de las regiones
Con estas palabras senadores de desde distintas bancadas con asiento en el Congreso, respaldaron la creación de circunscripciones transitorias especiales de paz en la Cámara de Representantes, que hoy abre paso, fruto del preacuerdo entre el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos y la guerrilla de las FARC, en La Habana –Cuba-.
En este sentido, el presidente del senado Juan Fernando Cristo (liberal), recordó que el Congreso de Colombia, es una corporación que trabaja para la paz. “Acompañamos al Jefe del Estado en este propósito. Desde el 2010, el senado y la cámara han legislado en favor de las víctimas. Preparando al país para la firma de la paz, que deriva en un salto cuantitativo y cualitativo al desarrollo del país”, dijo.
A sus palabras se unió, el senador caucano Jesús Ignacio García (liberal), quién consideró que la iniciativa es positiva. “En la recta final del 2013, Colombia y los colombianos reclamamos que se abran más espacios democráticos, para las víctimas. Para las personas que han sufrido directamente la violencia. Que su voz se sienta y se exprese en el escenario de la democracia. El Congreso de la República”, indicó.
El legislador, quién integra la comisión primera del senado, invitó a la guerrilla de las FARC a aceptar la puerta de la paz, luego de más de un año de negociaciones. “Desde el departamento del Cauca, se observa la posibilidad de sellar la paz con las FARC positivamente. Nuestra región ha sido víctima del conflicto, que derivó en miles de personas desplazadas. Este hecho ha impedido, que se planee por décadas el desarrollo del sector urbano y rural, profundizando de paso, la crisis del sector agropecuario”, añadió.
Más adelante, su colega nariñense Manuel Enríquez Rosero (partido de la U), subrayó que la firma de la paz, abriría un nuevo escenario para las zonas fronterizas. “Las zonas francas agroindustriales se convertían en un generación de desarrollo social, económico y productivo, estimulando el trabajo en el campo. Sería una plataforma al comercio exterior. Una oportunidad para elevar el consumo interno, al tiempo que el Gobierno estaría habilitado para impulsar incentivos e instrumentos de apoyo interno al sector agropecuario, en regiones como el Putumayo, Cundinamarca y la zona rural de ciudades como Bogotá, Pasto y Puerto Asís”, manifestó.
En esa línea, el senador por la circunscripción indígena Marco Avirama aseveró que la construcción de la paz es una oportunidad histórica liderada por el presidente Juan Manuel Santos con el acompañamiento del Congreso. “Bajo ese escenario, nos hemos reunido con las comunidades indígenas, con el propósito de edificar actividades de carácter interdepartamental. Este proceso, ha dejado como resultado, que nuestros hombres y mujeres indígenas, son los más interesados en la paz”.
Al referirse a la circunscripción especial para la guerrilla de las FARC en la Cámara de Representantes, el legislador afirmó que es muy importante que su puesta en marcha, tenga como interlocutor y protagonista a las víctimas de la violencia.
“El gran aporte del proceso de paz y en particularmente la creación de la circunscripción especial para las FARC, radica en que sea un espacio de representación para las minorías. Que represente a los campesinos, a los afrocolombianos. Representen a la gente humilde” dijo.
A este grupo de senadores se unió, Jorge Guevara, quién al hacer su lectura de la actual coyuntura de Colombia alrededor de una salida negociada al conflicto armado puntualizó:” Para lograr la paz, es necesario tragarse muchos sapos. Lo importante, es que los sapos no estén envenados, ni dinamitados”
Con estadísticas en mano, el legislador consideró que los 26 billones de pesos que el Gobierno colombiano invierte en la guerra, una vez se selle la paz, 16 billones sean girados a fortalecer la educación. “Una circunscripción especial para la guerrilla de las FARC en la Cámara de Representantes, es un espacio de representación política, que se hace necesaria para sellar el pacto de paz”.
Para el grupo de senadores, de distintas bancadas coincidieron en señalar que “no se puede dar marcha atrás en el proceso de paz. “Los colombianos en su conjunto, de todas las clases sociales, desean que se firme la paz, como un camino de edificación en favor de la educación, con el objetivo que este sector responda a las necesidades de la comunidad y al aparato productivo de las regiones del país”.
