22 de abril de 2025

Jorge Robledo: este país no va bien

12 de febrero de 2012
12 de febrero de 2012

jorge enrique robledoBogotá, febrero 13. (Colprensa). Fiel a su filosofía izquierdista, el senador Jorge Robledo, del Polo Democrático, encuentra mil razones para criticar el gobierno del presidente Juan Manuel Santos. Son pocos los hechos del gobierno que se escapan de su visión aguda. Con argumentos de peso prueba por qué es la manzana de la discordia entre tanto unanimismo.

 


¿Cómo ve los primeros 18 meses de mandato de Juan Manuel Santos?

Es evidente que estos 18 meses del gobierno de Juan Manuel Santos se pueden evaluar dependiendo de en quién se piense: si se piensa en los intereses de los monopolios nacionales, de los sectores pequeños de la sociedad más poderosos, le ha ido de maravilla. Pero si se piensa en el común de la gente, los trabajadores, la clase media, los pequeños y medianos empresarios, las cosas van muy mal. Tan mal van que Colombia es hoy el tercer país más desigual del mundo y el Gobierno Nacional no mueve un dedo para modificar estas circunstancias. Al contrario todo lo hace para profundizar en políticas que vienen de antes y que son responsables de esa dolorosa realidad nacional.

¿Qué piensa de la Unidad Nacional, cree que ese unanimismo le hace bien o mal a la democracia del país?

Esta es una Unidad Nacional que es amplia por quienes la conforman, pero no por sus fines porque les sirve a sectores muy reducidos de la vida nacional, en ese sentido es una unidad que no es de signo positivo sino negativo porque es para perpetuar los gravísimos problemas nacionales. Tanto unanimismo ha generado otro hecho que es muy pernicioso para un país como Colombia y es el poco debate y controversia democrática. El sistema político es muy fuerte no solo en el Congreso. También en los medios de comunicación, lo que genera un unanimismo enfermizo, que además no tiene asidero en la realidad porque el unanimismo en Suecia o Noruega sería distinto. Son países que funcionan en mejores condiciones, pero el unanimismo en Colombia es para perpetuar un status quo inocuo. Realmente, el país está enfermo y esta Unión Nacional de Santos lo enferma aún más.

¿Cuál considera que es el gran error de Santos?

La perpetuación del status quo. Juan Manuel Santos lo que hace es continuar con las mismas políticas económicas y sociales que vienen desde 1990. Las del consenso de Washington: apertura a las importaciones, libre comercio etc. En ese sentido ese continuismo del Gobierno anterior en todo, en confianza inversionista, en seguridad democrática y en cohesión social, han sido su gran paso en falso.

Usted ha sido crítico con los Tratados de Libre Comercio que ha firmado el país, ¿por qué no los considera necesarios?

Son tratados que significan alianzas de toche con guayaba madura, de mula y jinete. Soy amigo de que Colombia se relacione con el mundo, pero no en las condiciones de desigualdad que significan estos tratados. Es poner a los empresarios colombianos a competir, de igual a igual, con las poderosísimas transnacionales norteamericanas, europeas o norcoreanas. Ello significa una especie de masacre. De hecho, masacrada la producción agropecuaria habrá más desempleo por esta vía. Así Colombia termina convertida en una especie de colonia y ya la historia de la Colonia española nos prueba que esa no es una buena manera de relacionar a los países. Si Colombia estuviera preparado para competir, yo sería partidario de los TLC pero llevamos 20 años hablando de esto y no se ha hecho ninguna modificación que apunte a ser un país competitivo. Estamos exportando hoy lo mismo que hace años, más de 80 por ciento de las exportaciones del país son de materias primas mineras y agrícolas y para eso no se necesitan tratados de libre comercio.

Otro tema del que usted ha sido un gran crítico es el de la restitución de tierras. ¿Qué es lo malo de este proceso?

El Polo presentó un proyecto de restitución de tierras distinto al del Gobierno porque nos pareció que el del Gobierno era muy mediocre. No porque estemos en contra de la restitución. La crítica en este momento es que las cifras de esa política no dan para cumplir con las promesas. El Gobierno dice que en 2011 se restituyeron 699 predios, que este año restituirán 2.100 predios y que en 2013 se restituirán 8.400 predios. Esto sumado da que, al finalizar 2013, habrán restituido 11.199 predios y Santos se comprometió a restituir 160.345 tierras, de 350 mil familias despojadas. Peor no pueden estar las cosas. Pero el país no parece entenderlo porque Juan Manuel Santosy Juan Camilo Restrepo se han dedicado a echarse flores y a decir cosas como que lo que están haciendo es un esfuerzo monumental, una verdadera revolución agraria etc. ¿Cuál es el truco del Gobierno? Presentar como restituciones los proyectos de tierras que vienen de gobiernos anteriores, titulaciones a colonos, afrodescendientes y tierras de la DNE.

Las metas del Gobierno son muy mediocres, pero lo que más me preocupa que estén haciendo ruido con unas metas tan malas. Además desinvirtieron la carga de la prueba. Ahora los procesos se van a pegar la enredada del siglo, con el agravante que solo se han nombrado unos 5 jueces agrarios y aspiran a 22 este año. Si no hay jueces menos van a poder cumplir la promesa. Yo soy enemigo de la demagogia.

La política minera también ha sido uno de sus blancos contra el Gobierno…

Yo he dicho que minería sí pero no así, no estoy en contra de la minería. Creo que debe haber minería de todos los tamaños en el país. El Gobierno está persiguiendo a la pequeña y mediana minería, esa gran minería debe pagar las regalías que deben ser, no las que está pagando. Segundo, debe pagar los impuestos que deben ser, de renta, y tampoco los está pagando. Acabo de descubrir, por ejemplo, que les deducen del impuesto de renta lo que paguen en regalías. Deben ser respetuosos del medio ambiente y respetuosos de las garantías laborales a los trabajadores, y nada de eso se cumple.

¿En qué otros temas toma distancia del Gobierno?

No comparto el conjunto de la política macroeconómica. En lo político me parece que la reforma a la justicia es horrible porque es someter al poder judicial a la férula del poder Ejecutivo. Eso es gravísimo porque la democracia colombiana señala la separación de los poderes como uno de sus principales pilares y si el Ejecutivo ya controla el Legislativo, ya tiene amaestrados a una mayoría inmensa de legisladores, y además sometido al poder Judicial. Hago una pregunta: ¿esto es la República de Colombia o el principado de Anapoima?.

¿Es usted el gran opositor del Presidente en el Congreso?

En general, el Polo y algunos líderes sociales y gremiales somos consecuentes con nuestro programa y creemos que el Gobierno del presidente Santos sigue llevando el país al abismo.