21 de abril de 2025

Un lema bueno hasta la última copia

22 de enero de 2012
Pues bien, esta ultima o fue negociada por sus creadores o hurtada  descaradamente en los Estados Unidos.

Cuenta el colega Rodrigo Pareja, actual huésped de la ciudad de Atlanta, Georgia, que en uno de los tantos canales latinos que allí se ven aparece el eslogan de La Bastilla adjudicado al café House Maxwell, otro de los tantos cafés solubles a los que se hace publicidad en los Estados Unidos.

El hallazgo del ávido reportero amerita averiguar qué paso con dicho lema, uno de las de mayor impacto y creatividad de los publicistas maiceros.

El Contraplano consultó en referencia a don Alfaro Cadavid Macías, un experimentado publicista y hombre de radio que tiene una espléndida memoria sobre estos dos campos de la comunicación, en los que siempre se movió como pez  en el agua:

“Apreciado Orlando: Le quito un par de  minutos para referirme al tema de los slogans publicitarios. Desde muy niño, hacia el año 1940, oía yo con frecuencia una propaganda que decía "Café la Bastilla, bueno hasta la última gota". Esa frase me quedó sonando como síntesis de un café colombiano de extraordinaria calidad mundial.  Pero en 1955, cuando trabajé en Bogotá, en la Empresa Colombiana de Propaganda que dirigía Alvaro Ponce de León, descubrí con cierta frustración en una revista especializada en publicidad que ese slogan era de una marca de café norteamericana muy antigua, y, por consiguiente, la marca antioqueña de don Hipólito Londoño no era la creadora del slogan sino su simple admiradora y usufructuaria.

El miércoles no pude entrar a Google a averiguar lo pertinente, ya que estaban en huelga. Pero en la madrugada del jueves busqué en Google la marca Maxwell que señala Rodrigo Pareja como posible usurpadora del slogan en mención, y encuentro que, en efecto, nuestro Café La Bastilla nada tiene que ver con la creación de dicha frase, toda vez que Maxwell la patentó hace mucho más de un siglo, a finales del siglo XIX. Al parecer fue el presidente Theodoro Roosevelt el espontáneo creador del famoso slogan”.     

Don Alfaro, quien pertenece a una cochada Cadavid diferente a la mía,  cambió de tercio:

“Y a propósito de slogans, imagínese mi grata sorpresa cuando -al cabo de cincuenta años- leo por primera vez en mi vida que alguien de su perspicacia  señala como slogan imperecedero aquel que decía: "Calzado Triunfo-Unión, suave como la media, durable como el pie". Lo inventé yo en el año 58 o 59, recién entrado a Publicidad “Tea” como copy-writer. Pero esa fabrica dejo de funcionar al cabo de tres o cuatro años. ¿Culpa del slogan? No creo. Pero, por si las moscas, mejor no presumir”.

La apostilla: El remate también corre por cuenta de Don Alfaro, uno de los mejores libretistas que tuvo en Colombia don Hebert Castro, “El coloso del humorismo”: En cuanto al bello slogan, "Su fama vuela de boca en boca", leí alguna vez que esa frase la inventó cuando joven el futuro presidente y gran fumador Mariano Ospina Perez, tal vez vinculado a la Colombiana de Tabaco.