Desde Armenia
Carlos Alberto Mejía tiene formación académica como jurista y se ha metido en los vericuetos de la constitución del 91 como el que más, incluso, escribió un interesante libro comentado sobre la carta magna.
Fue asesor de la constituyente de la mano de Jaime Castro Castro, toda una autoridad y de quien Mejia aprendió los rudimentos del derecho constitucional.
Ha sido profesor de buena calidad en la Universidad y como notario dejó una huella de probidad en el ejercicio de la exigente función.
La elección del nuevo personero es una garantía para la defensa de los intereses colectivos.
Mejía es un hombre descomplicado pero responsable.
Tenemos personero, sin ninguna duda.
Y EL PRESIDENTE DEL CONCEJO
Entretanto, al presidente del concejo Alexander Agudelo hay que informarle que los medios de comunicación no son sus amanuenses ni están a su personal servicio.
Su falta de experiencia lo llevó a criticar de manera injusta el trabajo de los medios que tienen la obligación de alertar, como lo hicieron, sobre posibles inhabilidades en la elección de alguno de los aspirantes a la personería de la ciudad.
Debe entender cuál es su rol como presidente de la entidad y respetar a los medios de comunicación que no obedecen a las circunstancias eventuales de un político en pañales sino a los intereses generales.
Hay que diferenciar los roles y en esta ocasión el presidente del cabildo mostró su poca preparación en temas de manejo de lo público.
Pero también es sabido que todos debemos respetar el trabajo de los corporados, como les dicen ahora de manera rimbombante, pero cada loro en su estaca.
Si los medios de comunicación no ponen el dedo en la llaga iban de bruces a meterse en un problema mayor si hubieran insistido en la elección como personera de una joven profesional que estaba inhabilitada.
IRRESPONSABILIDAD DE UN EDITORIAL
Muchos nos despertamos hoy súpitos ante un editorial del periódico La Crónica en el sentido de que ¡no lo puedo creer! se puede violar la ley y la constitución.
Afirma de una manera ramplona e irresponsable el editorialista que "En un país en el que las mañas se legalizan cuando no existe la buena fe y/o la honradez, el debate de si puede o no en derecho ser personera, es lo de menos".
Cómo puede creer una persona medianamente sensata que cumplir con la ley es lo de menos.
Estamos muy mal cuando algunos dizque observadores de la vida pública andan en una confusión terrible y no tienen idea de que, por lo menos, los periodistas deben dar ejemplo de respeto por la institucionalidad.
Instar a atropellar la constitución y la ley es un acto reprochable.