29 de marzo de 2024

Mala calificación a Autopista del Café generó polémica

22 de noviembre de 2011
22 de noviembre de 2011

La polémica se inició en la edición del Comentario Económico del Día, que fue publicado el 2 de febrero de este año, y en la que califica la obra como “la campeona de la incompetencia vial”, al señalar que en “13 años de desidia administrativa continua”, solo se habrían adelantado 270 kilómetros

“Allí se otorgaron garantías de ingreso mínimo generosas, mal valoradas, donde la nación inclusive asumió riesgos que le correspondían al concesionario. El cronograma inicial comprendía tan solo 2 años de ejecución (arrancando en agosto de 1998), con entrega esperada en 2000. Una década más tarde, esto aún no se ha culminado. Dicho plazo se fue extendiendo sucesivamente en los años 2000, 2005, 2006 y, el último, en 2008.

El mantra ha sido el mismo de siempre: problemas técnicos, financieros y de adquisición de predios. Los sobrecostos ya bordean el 68% y, por supuesto, nadie ha calculado el lucro cesante. Difícil creer que se trate de la odisea de una miniobra en el corazón del país, parecería la historia de un ‘Ícaro megaproyecto’ que pretendiera la conexión de nuestra Orinoquía con países vecinos”, describe el artículo.

Debido a la fecha de publicación del comentario, se habría esperado que el tema fuera tema del pasado, pero la semana anterior el diario risaraldense La Tarde presentó estas consideraciones como noticia, encendiendo la controversia, que no se dio en febrero pasado, entre el centro de estudios económicos y la concesión encargada de las obras. El ánimo se caldeó incluso más con el artículo presentado ayer en el diario nacional La República denominado “Concesión Autopista del Café asegura que no tiene sobrecostos”.

Frente a dicha polémica Sergio Clavijo fue consultado por La Crónica del Quindío y dijo que la discusión reside en “la manera de cómo se toma el concepto de ‘sobrecosto’, de si se entiende como un pago superior por un mismo bien o si, como sucedió, hubo que hacer el trazo por otro lado, con inconvenientes de mala ingeniería y problemas ambientales”.
El autor del documento reiteró que en el artículo firmado por él “no se señala a nadie por su nombre propio”, lo que podría ser parte del motivo del disgusto: “En el informe me refiero a la obra, pero la confusión podría venir del hecho de que el proyecto tiene el mismo nombre de la concesión encargada”, consideró.

No obstante, el problema para el gerente de la concesión, Luis Guillermo Velásquez, es de otra índole. “Es injusto que un informe hecho en el parque de la 93, en Bogotá, señale sobrecostos lejanos a la realidad del trabajo desarrollado en la región. De esta manera la Anif se confunde con adiciones presupuestales otorgadas por el gobierno nacional e incluso con trabajos financiados por la misma empresa”, explicó.

El representante legal recordó como en 1997 se firmó el contrato que llevó a que a inicios de 1998 se empezaran a ejecutar las obras por un periodo de dos años. Sin embargo el año siguiente la región fue víctima del sismo de 1999, lo que habría entorpecido el adecuado desempeño de los trabajos.

“Luego entramos a los años 2000 y 2001, fechas en las que la seguridad vial se encontraba en una situación dramática y que redujo el flujo vehicular, lo cual es un aspecto primordial para el éxito de una concesión. Entonces en 2004 el gobierno decidió adelantar un proceso de reestructuración de concesiones del país, trasladando el plazo de entrega a 2008”.
Velásquez reiteró que en esta vigencia se logró dar total cumplimiento al contrato básico, suscrito en 1997 y respetando los plazos.

“Posteriormente, en 2010 la comunidad solicitó algunas obras complementarias a la obra inicial, como es el caso de la variante Sur, en Pereira, las cuales fueron incluidas en un Conpes pero a las que les faltó la financiación. Lo que hizo la concesión Autopistas del Café fue aportar de sus propios recursos una suma de $240 mil millones. En este momento es de allí que se ejecutan los trabajos, hemos obtenido cupos de crédito por $250 mil millones y se han ejecutado $93 mil 500 millones, todo originado de la misma concesión, mientras esperamos a que la nación nos desembolse la correspondiente contrapartida a partir de 2012”.

Agregó que el único tramo que faltaría por ejecutarse del plan operativo dispuesto sería la adecuación de la primera entrada a Circasia en la vía Armenia-Pereira, la cual no ha sido posible por la renuencia del propietario de un predio requerido.
“Este señor se volvió experto en líos y desde hace 10 años ha entorpecido el progreso de las obras en este sector. El último recurso al que hemos acudido para descongestionar este trámite fue abrirle una demanda para expropiar el terreno que se requiere para la solución vial”, concluyó.