La pesadilla del secuestro no ha terminado para 12 uniformados
El drama del secuestro continúa para las familias de los sargentos viceprimeros del Ejército, Robinson Salcedo Guarín y Luis Alfredo Moreno, quienes fueron secuestrados en la toma a la base de Miraflores, Guaviare, el 3 de agosto de 1998.
Así como para los allegados al sargento viceprimero del Ejército, Luis Arturo Arcia, y el sargento primero Luis Alfonso Beltrán, secuestrados en El Billar, Caquetá, el 3 de marzo de 1998.
Sin embargo, los familiares confían en que ellos, al igual que el intendente de la Policía, Luis Hernando Peña, y el sargento primero de la Policía, César Augusto Lasso, secuestrados en la toma a la base de Mitú, Vaupés, el 1 de noviembre de 1998, regresen a la libertad.
Los otros miembros de la Policía que permanecen en cautivero desde el 12 de julio de 1999, cuandó ocurrió la toma a la base de Puerto Rico Meta, son: el sargento viceprimero José Libardo Forero; el intendente Wilson Rojas, el subintendente Jorge Humberto Romero, el intendente Jorge Trujillo Solarte y el intendente Carlos José Duarte.
Y por último, el no grato galardón de 'el secuestrado más antiguo del mundo', con 14 años en cautiverio, es para el sargento del Ejército, Héctor Velásquez Carrillo, quien fue secuestrado el 27 de julio de 1997 en San Antonio de Atenas, en la vía que conduce al aeropuerto de Florencia, Caquetá.
Estos colombianos anhelan que la mediación del Gobierno les permita salir de esta pesadilla y volver a abrazar a sus seres queridos.