Programa Mundial de Alimentos destacó la labor de RISA
Con estas palabras, Preveen Agrawal, representante para Colombia del Programa Mundial de Alimentos, se refirió a las buenas acciones que ha liderado Risaralda y en general el Eje Cafetero, por disminuir el hambre y la situación de pobreza en las familias.
El Gobernador de Risaralda, Víctor Manuel Tamayo Vargas, durante la instalación del evento, solicitó al PMA darle continuidad al apoyo económico y logístico brindado al programa RISA, con el fin de asegurar su permanencia en el tiempo para beneficiar a las familias más pobres y vulnerables.
Ante esta petición, Agrawal ratificó su compromiso con el Eje Cafetero y prometió ayudar cuando se le solicite, al departamento de Risaralda y sus iniciativas en seguridad alimentaria.
En el estudio sobre la situación alimentaria del Eje Cafetero, se concluyó que los grupos más necesitados son los indígenas y afrorisaraldenses, quienes en gran porcentaje presentan desnutrición por causas culturales, ancestrales, de inocuidad y salud en los pueblos más alejados de las capitales.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Salud y la Fundación Universitaria del Área Andina, el 6,1% de los niños afrodescendientes del área rural de Risaralda están agudamente desnutridos, seguido del 3,8% de los niños y niñas Emberas y el 2,6% de los mestizos.
El ENSIN (Encuesta Nacional de Situación Nutricional en el Eje Cafetero) que es más generalizado, refleja que de los 26.300 indígenas de Risaralda, el 4% presenta desnutrición aguda, el 80% desnutrición crónica y el 43% desnutrición global.
Como mayor preocupación de las entidades encargadas de las investigaciones sobre la situación alimentaria, quedó el hecho de que la lactancia materna, que es el primer paso para garantizar la sana alimentación a futuro, disminuyó de un 2,2% a 1,6%.
Según José William Martínez, director del Centro de Investigaciones de la Fundación Universitaria del Área Andina, quien lideró la investigación sobre la situación nutricional de niños menores de 5 años, en 1.707 niños estudiados en Risaralda, el 4,5% tienen sobrepeso principalmente en Balboa, Dosquebradas, Guática, Pereira y Marsella, mientras que sólo el 0,6% de los niños tienen muy bajo peso con respecto a la estatura.
“Este resultado es asociado a la falta de sana alimentación porque son niños que comen alimentos “chatarra” o de “paquetes”, puntualizó Martínez.
Según el estudio, el 21% de niños de 9 a 13 años consumen diariamente alimentos “chatarra” y el 20% entre los 14 y 18 años.
Por su parte, la Encuesta Nacional de la Situación Nutricional en el Eje Cafetero, realizada por el ICBF en el 2010 y que es insumo del accionar de los Departamentos, reportó que el 37,3% de cada 100 hogares del Eje Cafetero tienen inseguridad alimentaria y el 22,9% de cada 100 niños de 6 a 59 meses tienen prevalencia de anemia.
Las causas de inseguridad alimentaria están asociadas al cambio climático que causa pérdida de cosechas, al desempleo, el desplazamiento forzado, la carencia de tierras adecuadas, la poca infraestructura productiva, la inaccesibilidad a tecnologías apropiadas, altos costos de producción, estructuras ineficientes de mercados, riesgo en la actividad productiva, poca cultura asociativa, pocas fuentes de financiamiento oportunas y adecuadas y bajos niveles de valor agregado.