28 de marzo de 2024

Las pretensiones del honrable doctor Atilano

15 de junio de 2011
15 de junio de 2011

Atilano Alonso está absolutamente desdibujado por cuidar la espalda de sus pecaminosos socios.

Es inadmisible que el rector de los próximos destinos de la ciudad, que bajo su responsabilidad estará lo que viene, tenga la cara dura para afirmar cosas espeluznantes.

“Sólo cuando se notifique a la señora Ana presentaremos la terna”-hasta ahí está bien y tiene la razón- pero agregar de inmediato que se tomarán todo el tiempo y que la llevarán a las instancias de la dirección nacional de Cambio, es un truco facineroso para alargar en el tiempo la agonía, no para quien ha sido inferior, sino contra los intereses colectivos. Y sostener que una vez entre en operación la ley de garantías no “podrá haber cambios” en el cuadro de honor de la  destituida es otro esguince para tapar la podredumbre en los intestinos de la alcaldía.  La tapa del congolo.

Fríamente calculado todo. Se quedarán  más allá del 29 de junio.

Como lo hacen los tenebrosos asaltan con  requiebros a la ley y  violando  los cánones de la decencia están a la orden del día. Hay que torcerle el pescuezo a lo preceptuado por la constitución  y al decoro para mantener las riendas de una desprestigiada administración.

Ahora estamos asistiendo a la cruda realidad sobre cómo opera la banda que nos ha administrado en los últimos años.

Trampas aquí y allá. Si nos atenemos a una fuente de certera credibilidad habrá, una vez surta el efecto el edicto notificatorio, un escrito que dilatará más el asunto amén de una tutela.

Gracias honorable Atilano por haber sido tan directo en medio de la crisis.

 Evidente que su proyecto político ha terminado.

Sin más comentarios. Porque esto pasó de castaño oscuro y genera fastidio.
 

Mostraron el cobre