Nuevas denuncias en el Senado sobre falsas desmovilizaciones
Uno de los citantes, el representante liberal Guillermo Rivera, aseguró que su partido había advertido desde el año 2006 sobre la presencia y fortalecimiento de estas organizaciones en diferentes departamentos del país, y recordó cómo el ministro del Interior de esa época los quiso poner como irracionales de la política.
Aseguró que en ese entonces las denuncias sobre cifras infladas de desmovilización de hombres y armas entregadas, fueron interpretadas por el ministro como un instrumento de la oposición, o por lo menos un grupo de parlamentarios no afectos al gobierno, para no reconocer los avances en el desmantelamiento de más de 30 mil hombres.
También dijo que las Bacrim son herencia de los grupos paramilitares reciclados de los procesos de desmovilización y que actualmente son los mayores generadores de violencia en Colombia, afirmación que fue rechazada de inmediato por sectores afectos al entonces presidente Álvaro Uribe Vélez.
Parlamentarios de todos los sectores se mostraron preocupados por el auge y fortalecimiento de las Bacrim y le pidieron al gobierno del presidente Juan Manuel Santos, medidas inmediatas para contener su poder y fuerza en muchas regiones colombianas, ya que si no se combaten a tiempo podrían llegar a ser más peligrosas que los movimientos insurgentes o los grupos paramilitares.
Entre tanto, los ministros de Defensa Rodrigo Rivera y del Interior y de Justicia Germán Vargas Lleras, presentaron cifras que dan cuenta de la lucha que libra el gobierno con esas bandas criminales, aseguraron que son organizaciones sin ningún tipo de ideología, que están dedicadas al narcotráfico y el terrorismo y que no tienen ninguna posibilidad de diálogo para negociar su reinserción.