Juan Castillo Muñoz
Había nacido en la población de Inzá, Cauca; se había radicado en Moniquirá. Sus compañeros de tertulia nos enteramos de su partida el mismo día pero supimos de su voluntad personal en el sentido de que su cuerpo fuera cremado y sus cenizas se esparcieran al viento desde “El salto del Pómeca”. La mayoría de sus amigos y conocidos se enteraron de su fallecimiento por una caricatura del maestro Osuna publicada el día domingo 12 de diciembre del presente año, en el periódico "El Espectador".
Fue Periodista en TELECOM y Director de Internacionales en la Oficina de Prensa de la Presidencia de la República; también trabajó en RCN.RADIO, fue director y cofundador del periódico "Nuevo Límite". Igualmente tuvo una amplia trayectoria en "El Espectador", en "TODELAR" y en "EL SIGLO" y fue miembro de la Junta Directiva del Círculo de Periodistas de Bogotá, CPB y de la Federación Latinoamericana de Periodistas FELAP y miembro del Consejo de Cultura de Boyacá y Presidente del Centro de Estudios Históricos de Moniquirá.
Fue miembro de la Academia Boyacense de Historia, de la Sociedad Bolivariana del Magdalena y Activo de la Asociación de Venezuela. La Academia Boyacense de Historia, publicó varios de sus libros, entre ellos, su "Poemario" y recientemente “Tronco Nuevo de Raíces Viejas, Crónica del Mestizaje" obra que está en circulación. Fue uno de los fundadores del “Encuentro de la Palabra y la Música”, auspiciado por la Alcaldía de Moniquirá y que durante varios años reunió a lo más granado de los compositores, músicos, intérpretes, escritores, historiadores y poetas, irradiando su saber hacia los estudiantes de los diferentes colegios de su patria chica en la población boyacense de Moniquirá.
Contrajo matrimonio con Aura Ulloa, de cuya unión son Esperanza, Fabio, Alvaro, Carlos, Raúl y Consuelo. En la "cofradía" de los pensionados periodistas aún hacemos muchas y buenas reminiscencias sobre las labores en general de Juan Castillo Muñoz y en lo personal no podré olvidar la ocasión en que me expresó, "esos que usted y otros llaman insistentemente desplazados son, en verdad, desarraígados…"