Manizales necesita con prioridad una nueva vía a Bogotá
Es una necesidad y un reto. Mientras la capital caldense no tenga una vía expedita a Bogotá, el centro de consumo, y de negocios, más importante del país, no será una ciudad competitiva.
Aislamiento de Manizales
Para entender el aislamiento de Manizales no es suficiente hacer un examen de la compleja situación geográfica y geológica de sus rutas de salida, transitando por un escenario abrupto y de rocas blandas intensamente afectadas por fallas geológicas activas donde los usos del suelo que entran en conflicto con la aptitud del suelo pasan su cuenta de cobro en unas temporadas invernales, últimamente exacerbadas por efecto del calentamiento global.
El escenario nacional es un factor determinante que no le contribuye a la ciudad: mientras la apertura económica le exige al país resolver su situación mediterránea ligando sus centros de producción a los dos océanos de la patria, el país apenas avanza con vías de características de primer orden a lo largo de los valles interandinos que transcurren en dirección Norte-Sur sin encontrar a la fecha una solución al sistema transversal con el cual pueda salvar sus cordilleras.
Túnel de la Línea
El primer esfuerzo significativo que ha hecho Colombia para transversalizar su sistema vial lo constituye la construcción del Túnel de la Línea, para ligar a Bogotá con el Pacífico, y por lo tanto para sacar el 74% del valor agregado que es lo que se genera en Bogotá a Buenaventura, un puerto que busca acondicionarse para naves tipo Panamax, lo que le significaría al país llegar apenas al año de 1914, dado que esa es la fecha de inauguración del canal de Panamá cuya devolución por parte de Estados Unidos se explica por la falta de competitividad de estas embarcaciones, debido al ingreso de otras naves de gran envergadura cuyos costos se reducen de 10 a dos centavos de dólar por contenedor milla.
Reconversión industrial
A lo anterior se suma el hecho de que Colombia no ha definido el tipo de industrias con las cuales puede ingresar a la economía mundial: es el caso de Manizales dada su condición mediterránea. Aunque en los puertos se moviliza el 90 por ciento del comercio mundial, en razón de que nuestra región andina no tiene un puerto competente en ninguno de los dos mares colombianos, donde las ciudades están alejadas de los mares, las reconversión industrial del país solo tiene tres alternativas: orientarse hacia productos de alto valor agregado que hagan uso del transporte aéreo en aviones de gran tamaño que garanticen fletes bajos y un alcance directo a mercados tan alejados como Europa, Río, Canadá y los Ángeles.
También, a desarrollar industrias que deben ubicarse cerca de la materia prima y no del consumidor, así estas terminen saliendo por aire, mar o tierra a los mercados externos. Y finalmente actividades de transformación para las cuales fueron creadas nuestras industrias a partir de la década del 30 cuando se buscó un modelo de sustitución de importaciones con el cual se favoreció un desarrollo endógeno que nunca llegó, dado que el proteccionismo fue utilizado para acumular grandes capitales buscando altos precios y malas calidades y no la investigación.
Justo en el último tipo de industrias cae el caso de Manizales, solo que debe reconvertir su industria so pena de persistir en actividades de bajo nivel de desarrollo tecnológico con la cual este sector resulta francamente vulnerable a los efectos de la competencia, no solo surgida de los mercados externos sino del propio interior del país en caso de surgir competidores más eficientes.
La ciudad no será viable
Lo anterior permite concluir entonces que si Manizales no reconvierte su industria para hacerla competitiva haciendo uso de los beneficios del Aeropuerto del Café para ciertas actividades, y buscando el centro de gravedad del mercado interno que tira hacia Bogotá, usando una vía terrestre de condiciones competitivas, entonces la ciudad no será viable, palidecerá por los efectos metropolitanos generados al interior del Eje Cafetero y también por los que le sobrevienen como consecuencia de las autopistas de la Montaña y de las dobles calzadas al Valle del Cauca dado que los fenómenos de la ciudad-región tienen estos dos planos y jerarquías de desarrollo.
Es importante resaltar que desde la perspectiva regional, Caldas muestra otras opciones diferentes pero igualmente necesarias: la Transversal de Caldas que cubre el 40}% del departamento y genera beneficios para el 20% de su población, y que se ubica en una región que no genera más del 10% del producto interno del departamento. Esta vía tiene la importancia propia del transporte rural como catalizador de la pobreza e integradora del departamento, pero por las condiciones socioeconómicas señaladas exige un subsidio para mantenerla en excelentes condiciones.
La vía al Magdalena
Contrariamente la vía al Magdalena integra a Manizales , Villamaría y Chinchiná, un escenario donde se genera más del 70% del producto interno del departamento, y para el cual un proyecto de altas especificaciones la podría convertir en una transversal susceptible de generar beneficios suficientes para entregarse en concesión: sobre esta la Cámara de Comercio de Manizales avanza proponiendo soluciones audaces y futuristas, como la construcción de un túnel con una competitividad comprable o mejor al túnel de la Línea, dado que su ubicación no tendría esa altitud de por sí inconveniente.
Reconversión industrial y una vía de especificaciones modernas a Bogotá, constituirían las llaves para que la capital caldense salga del encierro en que la ha mantenido sumida por décadas una geografía difícil y aisladora.
Club de Leones Manizales la Suiza