5 de octubre de 2024

Me DAS o no me DAS: una conspiración contra el erario

6 de septiembre de 2010

El DAS informó que se habían presentado dificultades con la empresa contratista que no cumplió con las especificaciones técnicas requeridas y con el plazo previsto en el contrato. En aplicación de las fórmulas alternativas para la resolución de conflictos, previstas en la ley, el DAS y el contratista han llegado a un preacuerdo de conciliación pendiente de ser aprobado por la Procuraduría General de la Nación.

Lo sorprendente de esta historia es que detrás de este contrato fallido se pudo establecer la existencia de una presunta conspiración destinada a defraudar al Estado colombiano y compromete la seguridad  ciudadana por la incertidumbre que genera la tenencia y custodia de los equipos mencionados.

De acuerdo con información que hicimos pública en el debate exfuncionarios del DAS, no vinculados con la actual administración, obligaron al proveedor de los equipos a incorporar una firma intermediaria (que figura como el contratista) y solicitaron un incremento en los valores de la propuesta inicial para cubrir presuntamente algunos gastos tributarios y arancelarios no previstos desde el inicio.

Esta maniobra abiertamente sospechosa, implica sobrecostos cercanos a los 800 mil dólares y permitió que una firma particular, sin experiencia previa en la materia, administrara y custodiara equipos para la interceptación de comunicaciones y la realización de seguimientos. Dónde se encuentran tales equipos y su funcionalidad son un interrogante aún no resuelto y que requiere explicaciones prontas de parte de los organismos de seguridad y de control del Estado.

Así mismo, este caso es un llamado de alerta para los miembros del DAS sobre la permanencia e interés de algunos funcionarios y de personas ajenas a la entidad de mantener redes de corrupción y desinformación. De igual forma el Estado colombiano debe poner en ejecución las medidas de cooperación internacional previstas en la Convención Interamericana de Lucha contra la Corrupción, entre otras.

 Finalmente, el exiguo cubrimiento de esta noticia por parte de los principales medios de comunicación nacional hacen pensar que existen intereses oscuros deseosos de que el resurgimiento de la corrupción y del DAS o no me DAS pase inadvertido.